2012 La ciencia contra el fin del mundo

¿La Tierra se alineará con el centro galáctico el 21 de diciembre de 2012?

Escrito por: Jorge Colorado      Publicado: 22-02-12      Comentarios: 0

Los últimos años hemos sido bombardeados por un sinfín de teorías apocalípticas, todas ellas indican que el 21 de diciembre de 2012 será el fin del mundo. Fecha que marca, según la cuenta larga maya –y una de sus correlaciones GMT– el cambio del baktun 12 al baktun 13. Algo así como cambiar de 1999 a 2000, pero que los apocalípticos se empeñan en ver tiempos aciagos.

Entre todas las teorías apocalípticas, una de las más sobresalientes es la supuesta alineación que la Tierra hará con el centro galáctico el 21 de diciembre, alineación que traería consigo un baño de radiación esotérica en forma de un rayo cósmico. Algunos apocalípticos dicen que dicho rayo será mortal y otros afirman que se produciría un cambio de mentalidad, que pasaríamos a ser seres espirituales, la famosa Nueva Era de la cual se habla desde los años sesentas.

 ¿Qué es una galaxia?

Una galaxia es un enorme conglomerado de estrellas, es una agrupación estelar tan grande que a la luz le toma miles de años recorrer una galaxia de extremo a extremo.  El universo se encuentra lleno de galaxias, las hay de todas formas: espirales, espirales barradas, elípticas, irregulares, etc. Algunas de ellas se observan chocando con otras y deformándose. Las vemos organizadas en cúmulos y mega cúmulos y son parte de la macro estructura del universo. (ver imagen inferior)

Fotografía de varias galaxias (Imagen por el Observatorio Europeo del Sur, ESO.org)

Nuestro sistema solar está contenido dentro de una galaxia, la cual hemos llamado la Vía Láctea. Todas las estrellas que observamos en una noche despejada se encuentran dentro de ella, solamente si observamos usando telescopios o binoculares entre estrella y estrella es posible observar galaxias lejanas, ubicadas a millones de años luz de nosotros. Nuestro ojo las detecta como difusas nubes blancas que contrastan con el fondo oscuro del espacio. Solamente con técnica e instrumentación adecuada es posible fotografiar galaxias y observar a detalle sus formas, sus núcleos y simular sus colores.

Dibujo esquema de las galaxias M65 (abajo derecha), M66 (abajo izquierda) y NGC 3628 (arriba). Imagen por Image: Michael Vlasov / ASOD.

Son pocas las galaxias que se observan a simple vista, en el hemisferio sur son visibles las Nubes de Magallanes que son galaxias satélites a la Vía Láctea y en el hemisferio norte es visible la Galaxia de Andrómeda ubicada en la constelación del mismo nombre y alejada de nosotros por casi dos millones de años luz. (Imagen inferior)

Fotografìa de la Galaxia de Andrómeda (Imagen por Antonio Borgonovo, Asociación Salvadoreña de Astronomía)

Nuestra Vía Láctea

Nadie ha visto nuestra Vía Láctea desde lejos, para ello tendríamos que construir una nave espacial que viaje por un millón de años luz, gire y tome una fotografía y regrese. Así que tenemos que conformarnos con verla desde adentro, siendo así la vemos dentro del plano en donde nos encontramos como una banda de millones de estrellas que cruza de un lado a otro el cielo. Es muy visible en sitios alejados de las ciudades, pues la contaminación lumínica la borra del cielo urbano, los antiguos europeos veían un chorro de leche en el cielo, de ahí el nombre de Vía Láctea. Observando otras galaxias y calculando las distancias de estrellas variables podemos imaginarnos la forma de nuestra Vía Láctea y se ha considerado que nuestra galaxia tiene forma de espiral barrada, tal como se observa en la imagen inferior.

Dibujo de la posible forma de la Vía Láctea (Imagen por Atlas of Universe)

A principios del siglo XX el astrónomo estadounidense Harlow Sharpley descubrió la localización del núcleo de la Vía Láctea, desde entonces ha sido estudiado a través de una enorme variedad de técnicas de observación. Dicho núcleo está ubicado en la constelación de Sagitario, desde El Salvador se observa al sur y es visible en las primeras horas de las noches entre los meses de julio a octubre.

Las últimas investigaciones sobre el centro galáctico han detectado la posibilidad que exista un agujero negro en su interior. Se ha registrado un extraño movimiento de las estrellas que residen dentro del núcleo galáctico entorno a un misterioso punto que no logramos resolver por medio de telescopios. El espacio debe de estar muy retorcido por la presencia de un objeto muy masivo para que las estrellas se muevan de esa forma, por ello se supone que estamos ante la presencia de un agujero negro (ver película aquí).

Vía Láctea vista desde la Tierra, imagen por Larry Landolfi, APOD

La tierra no corre peligro por la existencia del supuesto agujero, en todo caso el centro galáctico está muy lejos, ubicado a 30,000 años luz de nosotros, distancia que nos protege de cualquier radiación que el agujero emita. Pero más allá, si el agujero negro existe, es presa de su propia gravedad, está atrapado en el núcleo galáctico y no puede salir de él.  

El centro galáctico es esférico, desde cualquier punto que nos ubiquemos estaremos de alguna forma alineados con él. Para el 21 de diciembre de 2012, la Tierra sí estará alineada con el centro de la Vía Láctea tanto como lo está en este momento, y como lo ha estado desde que se formó nuestro planeta.

No existe ningún rayo misterioso que salga del centro de la galaxia, de existir ya se habría detectado desde hace muchos años. La observación de otras galaxias nos permite ver que no poseen ninguna radiación esotérica o misteriosa. Se ha detectado grandes eyecciones de material estelar en objetos exóticos como los quásares o se han visto explosiones de rayos gama, pero son eventos de poca ocurrencia y suceden a miles de millones de años luz de nuestra galaxia.

No hay nada que temer el 21 de diciembre de 2012, la supuesta alineación galáctica y su hipotético rayo cósmico es una patraña más que han inventado los apocalípticos. No se preocupe.



¿Los Mayas predijeron el fin del mundo para el 2012?

Escrito por: Jorge Colorado      Publicado: 12-02-12      Comentarios: 0

Fotografía de la Tierra (NASA-Proyecto Apollo)

Fotografía de la Tierra (NASA-Proyecto Apollo)

Las actuales profecías mayas son inventos modernos, generados por personas, canales de televisión y editoriales que han montado una campaña internacional que funciona como un buen negocio.

No existe códice, escrito o tradición oral maya que afirme el fin del mundo para el 21 de diciembre de 2012.

Los mayas creían en un final, igual lo creían los aztecas y otros pueblos mesoamericanos para quienes la actual existencia era la quinta después de varias creaciones fracasadas. Dichas creencias son mitos de creación y no se relacionan con realidades objetivas.

También se dice que el 2012 traerá un cambio espiritual para la humanidad. Este tipo de afirmaciones son producidas por las corrientes neoindígenas de la Nueva Era, las cuales mezclan filosofías orientales, pseudociencias, espiritualismo, religión y extraterrestres para afirmar cualquier cosa.

Decir que a partir del 2012 la humanidad cambiará espiritualmente es algo tan subjetivo que da lo mismo no decir nada. Durante la década de los sesenta y setenta se dijo que la humanidad había alcanzado la Era de Acuario y que vendría cambio de mentalidad; en realidad no pasó nada, las guerras, la pobreza, las enfermedades y la destrucción del medio ambiente se afincó aun más.

El 21 de diciembre de 2012 será el final del Baktún 12 y el inicio del Baktún 13 (según correlación GMT), sería como pasar de 1999 a 2000.

Pero, ¿Habrá un final para la Tierra?

Sí, en unos 5 mil millones de años el Sol saldrá de la categoría estelar llamada “secuencia principal” y crecerá a tal punto que en pocos millones de años nuestra estrella abarcará las órbitas de Mercurio, Venus y la Tierra.  Nuestro planeta desaparecerá engullido por el Sol.