2012 La ciencia contra el fin del mundo

Entonces, ¿Algún día se va a terminar el mundo?

Escrito por: Jorge Colorado      Publicado: 18-04-12      Comentarios: 0

Imagen artística del Sol transformado en gigante roja, visto desde la tierra. Ilustración creada por: Don Dixon, Cosmographia

Imagen artística del Sol transformado en gigante roja, visto desde la tierra. Ilustración creada por: Don Dixon, Cosmographia

Todo tiene un principio y un final, y la Tierra no será la excepción de la regla, a diferencia de los seres vivos la “vida” de los planetas es de varios miles de millones de años, por ese motivo no todos los días vemos “morir” a los planetas.

La astronomía calcula que en cada estrella posee un sistema solar particular, algunos con planetas gigantescos y otros con planetas enanos, lo cierto es que la vida de los planetas se encuentra muy vinculada con sus estrellas, y tal como se afirmó al inicio, todo tiene un principio y un final, las estrellas también están condenadas a desaparecer y con ellas sus planetas.

¿Se recuerda de los elementos atómicos?, seguro los ha visto dentro de la Tabla Periódica de los elementos químicos, en ella la ciencia ha organizado todos los elementos de la naturaleza que constituyen toda la materia del universo. Algunos son naturales, como el Hierro, el Hidrógeno o el Carbono. Por el contrario, otros son artificiales, creados en laboratorios como en Dubnio, Californio o el Nobelio. ¿Sabe cómo se han formado los elementos naturales? Pues se forman en las estrellas.

En estos momentos en el interior del Sol, nuestra estrella fusiona 564 millones de toneladas de hidrógeno en 560 millones de toneladas de helio, el sobrante ha sido transformado en pura energía que llega a nosotros en diferentes tipos de radiación (luz visible, infrarroja, ultravioleta, etc.). Dicho fenómeno físico se le llama nucelosíntesis estelar, la dinámica interna de las estrellas permite que se fusionen átomos más pesados, algo maravilloso desde el punto de vista cósmico porque ello permite el enriquecimiento del universo y la formación de sistemas solares con metalicidad.

Pero también es la condena de las estrellas, pues al agotar sus reservas de hidrógeno aumenta de tamaño, cambian de color, se vuelven rojas y muchas de ellas descuajan sus capas externas en el espacio, otras por el contrario, terminan en una violenta explosión llamada supernova.

En el caso de nuestro Sol, su final será convertirse en una estrella gigante roja, poco a poco irá creciendo y engullendo a los planetas Mercurio, Venus y la Tierra. Entonces será el verdadero fin del mundo, nuestro planeta terminará devorado en el interior solar.

No se asuste, se estima que tal evento ocurrirá dentro de unos 5 mil millones de años.

 



¿Los terremotos son señales del fin del mundo?

Escrito por: Jorge Colorado      Publicado: 26-03-12      Comentarios: 0

Portada de La Prensa Gráfica / Terremoto San Salvador, Octubre 1986

Los terremotos no son señales del fin del mundo, todo lo contrario, indican que nuestro planeta es un sitio dinámico y cambiante. Son fenómenos naturales generados por placas tectónicas o fallas geológicas que liberan fuerzas de tensión de la corteza terrestre. Los sismos no son creados por ningún dios encolerizado por nuestro comportamiento personal o colectivo, simplemente ocurren de la misma forma que ocurre la lluvia, el viento o las mareas. Como cualquier otro fenómeno natural, la mayoría de sismos pasan desapercibidos por nosotros, nos asustan solo cuando alcanzan una magnitud lo suficiente alta para mover objetos.

Observe un mapamundi y vea la costa atlántica entre África y Sur América, ¿Nota como ambos territorios encajan? Parecen encajar porque alguna vez estuvieron juntos, de eso hace millones de años, desde entonces se han retirado lo suficiente para que un océano los separe. Así mismo sucede con todos los continentes del planeta. India está chocando lentamente contra Asia, producto de ese choque se ha levantado la cordillera del Himalaya.   Los movimientos de los continentes suceden en tiempos geológicos, la vida de una persona no alcanzará para ver que África se funda con Europa y desaparezca el Mediterráneo, tal como lo muestra el gráfico inferior, una hipótesis de cómo será la Tierra dentro de 50 millones de años.

La tierra dentro de 50 millones de años (Imagen por Scotese, C.R., 2002)

Uno de los signos más sensibles del movimiento continental son los terremotos, y estos ocurren de forma continua en todo el planeta, porque la corteza terrestre continuamente se está moviendo, y lo hace muy lentamente. Su ocurrencia es aleatoria; es decir, que no tiene vínculos ni con eclipses, cometas, fases lunares, cambios climáticos (en El Salvador la gente cree que “tiembla” cuando comienza la temporada de lluvia), tampoco están calendarizados, ni poseen una frecuencia en años, meses o días.

Hoy nos parece que ocurren más terremotos que en otro momento de la historia, es una percepción creada por nuestros medios de comunicación cada vez más globales y rápidos. Actualmente nos damos cuenta al instante y en vivo lo que ocurre al otro lado del mundo, porque nuestra sociedad es totalmente global, así que si un terremoto golpea a Japón, Chile o Haití, nos damos cuenta de inmediato.

Lamentablemente los terremotos cobran vidas humanas, ello ocurre no porque el terremoto sea malo como tal o porque un dios desee matar a la gente. Son las condiciones de vulnerabilidad de las sociedades las que afectan; es decir, la infraestructura inadecuada, el aumento de la población con niveles de marginalidad y la poca educación en emergencia lo que realmente causa la mortandad.