La Agenda Pendiente
Fernando on Junio 9th, 2010
Durante la época electoral mucho se escucha de los cambios en legislación que son necesarios para mejorar nuestra democracia. Todos quisiéramos ver a más salvadoreños acudiendo a las urnas, convencidos en un candidato o una candidata, o en el mejor de los casos: motivados por las propuestas e ideas que presentan.
La realidad es totalmente distinta. Votamos por un partido o en contra del otro. Rara vez escuchamos ideas o propuestas concretas de como mejorar la calidad de vida, y pareciera que estamos acostumbrados a escuchar solamente ataques de ambos lados. Mucho se habla de ser una sociedad civil constructiva y con propuestas concretas para abordar esta problemática, pero hasta este momento solamente se ha quedado en la buena intención. Hay que reconocer que instituciones como FUSADES y movimientos como MIRE han hecho planteamientos concretos. A continuación quiero retomar algunas de estas propuestas y agregar algunas que considero son necesarias para fortalecer nuestras instituciones democráticas.
1. Concejos municipales plurales: Además de fortalecer los gobiernos locales y descentralizar servicios públicos hacia estos, es necesario retomar la idea de la elección de los miembros de los concejos municipales en proporción a la voluntad de la ciudadanía en las elecciones. Es necesario tomar en cuenta que debemos asegurándonos que la reforma permita la gobernabilidad a los alcaldes, pero a su vez inyectándole transparencia y consenso a la gestión local.
2. Rendición de Cuentas: Adicional a lo contenido en la Ley Transparencia y Acceso a la Información que el Grupo Promotor ha impulsado debemos fomentar una cultura de rendición de cuentas desde la óptica del ciudadano. Es necesario, y urgente, aprobar mecanismos de transparencia del financiamiento en campañas políticas para evitar el lavado de dinero, penetración del crimen organizado, y la utilización de fondos públicos para proselitismo.
3. Elijamos a personas no a los partidos: Es necesaria una reforma legal que permita que en la elección de presidente, alcaldes y diputados se incorpore en las papeletas la foto y el nombre de los respectivos candidatos. Los ciudadanos tenemos derecho a saber por quien estamos votando, y debemos ser nosotros los que elijamos a nuestros funcionarios, no los partidos.
4. Fortalecimiento y despartidización Instituciones Democráticas: El fortalecimiento de las instituciones democráticas requiere eliminar el sesgo partidario en las mismas. La Corte de Cuentas, la Corte Suprema de Justicia, el Consejo Nacional de la Judicatura, la Fiscalía General de la República, el Registro Nacional de las Personas Naturales, la Procuraduría para la defensa de los derechos humanos… e inclusive el Tribunal Supremo Electoral no deben ser parte de la estrategia política de los partidos políticos ni parte de la agenda a negociar a cambio de votos o apoyos.
5. Voto Residencial: Es necesario retomar de una forma seria el debate sobre la implementación de un voto residencial a nivel nacional. La experiencia de acercar las urnas a la ciudadanía va acompañada de un cambio de mentalidad de la ciudadanía hacia la participación electoral.
6. Reformas al Tribunal Supremo Electoral: Logrando la separación de las funciones administrativas de las jurisdiccionales y garantizar la eficiencia de la Institución ayudará a mejorar el nivel de confianza que la ciudadanía tiene a las instituciones democráticas. Esta propuesta que ha impulsado MIRE y FUSADES es necesaria para asegurarnos que la legislación en materia electoral se cumpla y garanticemos la transparencia en los procesos electorales.
7. Voto de Salvadoreños en el Exterior: Es necesario retomar el debate sobre el derecho constitucional que tienen los salvadoreños en elegir a sus gobernantes participando en elecciones en el exterior. En estas últimas elecciones hemos visto un importante paso al aperturar urnas para aquellos ciudadanos salvadoreños que no residen en El Salvador, sin embargo la afluencia fue suficientemente baja para considerar explorar otras formas de participación ciudadana de nuestra comunidad en el exterior.
Hago un llamado a la ciudadanía en general, a los líderes de opinión y en especial a las Universidades en el sentido a que incentiven la participación en el servicio público por medio de involucramiento responsable en los partidos políticos. No podemos quedarnos solamente como ciudadanos inconformes, como sociedad civil indignada, sin convertirnos en Agentes de Cambio. De la misma forma debe fomentarse el diálogo, y lograr consensos mínimos entre los partidos para promover la estabilidad político-democrática a largo plazo y generar confianza pública en el sistema de libertad. Debemos fomentar una cultura de transparencia y rendición de cuentas, que es fundamental para restablecer la confianza de la ciudadanía en una democracia. Podemos comenzar la reforma democrática que tanto necesitamos apoyando la Ley de Transparencia y Acceso a la Información que se está discutiendo en la Asamblea Legislativa e impulsada por la Sociedad Civil.
Por: Fernando Bautista, Presidente de la Junta Directiva de la Asociación Democracia y Desarrollo.
