LEJANO ESTE | Parte IV: Mi delirio

 

Delirio

  1. Estado de alteración mental, generalmente provocado por una enfermedad o un trastorno, en el que se produce una gran excitación e intranquilidad, desorden de las ideas y alucinaciones.
  2.  Dicho o hecho disparatado, insensato o carente de sentido común.

¿Por qué tardar tres días en bicicleta para ir a un lugar cuando se puede hacer en tres horas en un automóvil? Salir a la carretera en una bicicleta y recorrer a golpe de pedal grandes distancias, para muchos, suena como un hecho disparatado, algo que no tiene sentido, un delirio. Para esto tengo una respuesta: el que nunca lo ha hecho no sabe de lo que se pierde, y el que ya lo hizo no quiere detenerse. En lo personal, la bicicleta me da un sentido de libertad, de contacto con lo que me rodea, con la realidad, con otras personas y conmigo mismo. ¿Que si es peligroso, una locura? Quizás, pero cualquier cosa que se emprenda en la vida debe de tener siempre una cuota de delirio, ¿no lo creen?

#KmCero503 #Cicloturismo503 #RespetoAlCiclistaSV #BiciBlanca #Cicloturismo #Ciclismosv #Ciclistas #AurelioEnBici #ElSalvador #SoySalvadoreño #Ciclorrutas #DondeAndaAurelio #Cyclotouring #ElSalvadorEnBici #Aventura #Camping #Backpacking #Mochileros #EducacionVial #RespetoAlCiclista #PhotoOfTheDay #FollowMe #Like4Like #Love #Ciclistas #Bicicleta #cycliststyle #bicyclelicious #cyclistlife #cyclingphoto #LejanoEste #ciclismosenelsalvador #CicloturismoenElSalvador #dontskipelsalvador #itsawesomethere
Las ventas en la carretera son parte de los atractivos que se pueden observar viajando en bicicleta por El Salvador. Una venta de jícamas en el cantón El Paraisal, Usulután.

Salimos muy temprano de Usulután, muy agradecidos con la hospitalidad de Hilda y Jorge. Al frente tenemos que recorrer 87 kilómetros para llegar a nuestro destino, Conchagua, en La Unión. Dos cosas me tenían inquieto en esta ruta: el calor de oriente y una escalada de 471 metros que tenemos que hacer en el cerro El Capulín, La Unión.

#KmCero503 #Cicloturismo503 #RespetoAlCiclistaSV #BiciBlanca #Cicloturismo #Ciclismosv #Ciclistas #AurelioEnBici #ElSalvador #SoySalvadoreño #Ciclorrutas #DondeAndaAurelio #Cyclotouring #ElSalvadorEnBici #Aventura #Camping #Backpacking #Mochileros #EducacionVial #RespetoAlCiclista #PhotoOfTheDay #FollowMe #Like4Like #Love #Ciclistas #Bicicleta #cycliststyle #bicyclelicious #cyclistlife #cyclingphoto #LejanoEste #ciclismosenelsalvador #CicloturismoenElSalvador #dontskipelsalvador #itsawesomethere
Una sonrisa y una plática por la mañana es una de las satisfacciones que nos brinda andar en bicicleta en El Salvador.

Tal como lo comenté en el capítulo anterior, tenemos la errónea idea de que la carretera del Litoral es llana. Lo cierto es que es un terreno irregular de subidas largas y bajadas cortas. Además, en la mayoría del camino estuve pedaleando con viento en contra, algo que no me molestaba porque apaciguaba el calor que a las 10 de la mañana alcanzaba casi los 35 ºC. En este trayecto pasamos por Ereguayquín y Concepción Batres, en Usulután; luego cruzamos al departamento de San Miguel, donde llegamos a El Tránsito.
Los hombros de la carretera del Litoral están en buenas condiciones, por lo que se puede transitar tranquilamente evitando el tráfico pesado de esta carretera donde los vehículos livianos y pesados van muy arriba del límite de velocidad permitida en el reglamento de tránsito, el cual establece que en carretera abierta la velocidad máxima es de 90 km/h para vehículos livianos y 80 km/h para transporte pesado, pero muchos de ellos, la gran mayoría, se conducen a más de 100 km/h. Incluso no disminuyen la velocidad cuando llegan a un área urbana o una población en donde la velocidad límite es de 40 km/h.

kmcero503, Cicloturismo 503, Cicloturism, Ciclismo SV, Ciclistas, Aurelio en bici, El Salvador, Soy Salvadoreño, Ciclorrutas, San Salvador, Donde Anda Aurelio, Cicloturismo, Cyclotouring, Una Historia En Bici, Por El Litoral, El Salvador En Bici, Aventura, Camping, Backpacking, Mochileros, Educación Vial, Respeto Al Ciclista SV, Kilometro Cero, Lejano Este Parte tres, aurelio en bicicleta, parte cuatro mi delirio, usulutan, zacatecoluca, puente de oro
El límite de velocidad en carretera es de 80 km/h, pero los vehículos van a 100 km/h. Un peatón o un animal que se les cruce puede desencadenar un accidente.

En mi opinión, la alta velocidad al conducir es el principal motivo de los accidentes de tránsito en nuestro país. Los límites de velocidad no se respetan en lo absoluto y a los conductores se les olvida que de lo único que posiblemente tengan control es de su vehículo, solo hasta el momento en que algo sucede en la carretera, como por ejemplo: una vaca, un perro, un peatón cruzando la calle u otro vehículo maniobrando o moviéndose en dirección contraria. A una alta velocidad es imposible esquivar cualquier cosa que se interponga en el camino, lo que da como resultado accidentes con saldos fatales. Es frecuente ver en esta carretera vacas o perros atropellados a la orilla. Esta situación evidencia que los conductores salvadoreños somos irresponsables al momento de hacer uso del privilegio que es conducir un vehículo.

Alguien nos observa

kmcero503, Cicloturismo 503, Cicloturism, Ciclismo SV, Ciclistas, Aurelio en bici, El Salvador, Soy Salvadoreño, Ciclorrutas, San Salvador, Donde Anda Aurelio, Cicloturismo, Cyclotouring, Una Historia En Bici, Por El Litoral, El Salvador En Bici, Aventura, Camping, Backpacking, Mochileros, Educación Vial, Respeto Al Ciclista SV, Kilometro Cero, Lejano Este Parte tres, aurelio en bicicleta, parte cuatro mi delirio, usulutan, zacatecoluca, puente de oro
Viajar en bicicleta por  la carretera del Litoral parece sencillo, pues pensamos que el terreno es llano, pero hay sorpresas en el camino. Al fondo, el imponente volcán de San Miguel.

En esta etapa nos acompaña siempre en el paisaje el imponente el volcán de San Miguel, mejor conocido como Chaparrastique. Parecía que ese coloso de punta gris que toca el cielo se acercaba a nosotros, y no al revés. En una parte llana de la carretera, antes de llegar a El Tránsito, San Miguel, nos detuvimos un momento para hidratarnos un poco y poder contemplar con tranquilidad esa masa de tierra que es clasificada como un estratovolcán, un volcán cónico construido por muchas capas o estratos de lava endurecida, tefra, piedra pómez y ceniza volcánica. A diferencia de los volcanes escudo, los estratovolcanes se caracterizan por un perfil empinado y erupciones explosivas periódicas y efusivas, aunque algunos tienen cráteres colapsados ​​llamados calderas. La lava que fluye de los estratovolcanes típicamente se enfría y se endurece antes de extenderse, debido a su alta viscosidad.
El 16 de enero de 2002 este volcán activo tuvo una pequeña erupción de vapor, gas y ceniza desde el cráter de la cumbre, la cual duró tres horas pero no causó daños. Once años después, el 29 de diciembre de 2013, entró en erupción a las 10:30 a.m., arrojando cenizas y humo al cielo, y provocó la evacuación de miles de personas que vivían en un radio de 3 km alrededor de él. Por suerte nos encontramos a unos 10 km del volcán, pero su presencia es imponente en el horizonte.

kmcero503, Cicloturismo 503, Cicloturism, Ciclismo SV, Ciclistas, Aurelio en bici, El Salvador, Soy Salvadoreño, Ciclorrutas, San Salvador, Donde Anda Aurelio, Cicloturismo, Cyclotouring, Una Historia En Bici, Por El Litoral, El Salvador En Bici, Aventura, Camping, Backpacking, Mochileros, Educación Vial, Respeto Al Ciclista SV, Kilometro Cero, Lejano Este Parte tres, aurelio en bicicleta, parte cuatro mi delirio, usulutan, zacatecoluca, puente de oro
En nuestro viaje en bicicleta por El Salvador hemos encontrado paisajes muy hermosos. En este tour teníamos como plan acampar en la laguna de El Jocotal, pero esta vez no pudimos.

Al llegar al El Tránsito, San Miguel, debíamos tomar una decisión: ir a conocer la laguna de El Jocotal y acampar ahí o irnos de paso hasta Conchagua. Realmente lo pensé mucho, ya que me quedaban por pedalear 70 km. Por esas cosas de las corazonadas, cambiamos de plan y decidimos continuar por 12 km hasta llegar al conocido desvío de El Delirio, San Miguel.

Tierra de bicicletas

En esta parte de El Salvador el uso de bicicletas es muy popular. Una alegría, ya que se puede ver que la gente encuentra en ella un transporte alternativo eficaz.
Un tema no muy conversado entre los ciclistas es el uso de vaselina para evitar las escaldaduras en nuestro glúteos e ingle.

Algo muy peculiar y agradable es que entre Usulután y San Miguel pude observar alrededor de unos 20 residentes locales transportándose en bicicleta. No hay que sacar muchas conclusiones del porqué usan bicicletas en esta zona: primero, porque el terreno es plano; segundo, es un transporte mucho más barato y práctico en todo sentido. Se pueden ver bicicletas de todo tipo sobre la carretera y por los cantones. Mujeres y hombres se desplazan a sus terrenos o van a hacer las compras. También la utilizan como un medio de transporte para sus negocios; muchos de ellos son panaderos. Tuvimos la oportunidad de conversar con José Efraín González, quien vende pan francés y pan dulce en los cantones aledaños a El Tránsito. Su venta comienza desde muy temprano en la mañana y recorre unos 10 a 12 km o «hasta que el pan se me acabe», comenta José.
Pasando a otro tema –que siempre tiene que ver con la bicicleta–, una de las cosas poco comentadas por los ciclistas de largas distancias es que una de las partes que permanecen en fricción constante en el ciclismo son los glúteos, el ano y la ingle. Después de un par de horas en la misma posición pueden aparecer escaldaduras que son muy molestas, dolorosas y se pueden convertir en una úlcera que al infectarse complicaría nuestro tour grandemente. Debido a esto es muy importante aplicarse vaselina en esas partes antes de comenzar a pedalear. Las licras acolchadas pueden ser útiles para amortiguar, pero no para evitar el roce. Existen otros tipos de ungüentos especiales para ciclismo, algunos bastante caros, pero he encontrado que la vaselina para bebé ayuda mucho, es barata y fácil de conseguir en cualquier supermercado o farmacia. Solo debemos tomar algunas precauciones después de pedalear, por ejemplo, lavar bien las licras o ropa interior, ya que el sudor y la vaselina pueden ser la combinación perfecta para que las bacterias y hongos se cultiven, por  lo que podríamos tener otro tipo de problemas posteriormente. Para recordar siempre que debo colocar vaselina tengo un frase: «es preferible andar como bebecito y no escaldadito».

El Salvador todo tuyo

Romel Colindres es un migueleño que además de la pasión por las motocicletas tiene la misión de fomentar el turismo en la zona oriental de El Salvador. La bicicleta nos lleva por muchos lugares, pero también nos ayuda a conocer a muchas personas.

Al llegar a El Delirio nos detuvimos en una estación de servicio para comer algo y descansar. Eran las 11:30 de la mañana, luego de cinco horas pedaleando, un descanso nos caería bien, ya que el tramo que se nos avecinaba necesitaría de mucho esfuerzo. Aún estábamos a unos 58 km de Conchagua. Fue en ese lugar donde conocí a Romel Colindres, un motociclista aficionado cuya pasión es también el turismo. Él ha creado una página web que se llama El Salvador Todo Tuyo  y una página de Facebook  en donde publica fotos, videos e información turística de diversas partes del país.

Una linda niña lleva a su escuela cerca de El Tránsito su maqueta de la casa de la princesas. La bicicleta nos permite viajar lentamente e interactuar con personas en las carreteras.

«La página trata de mostrar lugares, paisajes, a veces escapadas en caminata y montañismo, ahorita de la zona oriental, como somos de aquí de San Miguel, que es donde más nos hemos destacado. Pero el sitio web abarca imágenes de El Salvador. Las fotos las pueden ver por departamentos», comenta Romel, quien tiene ya casi un año de estar trabajando en divulgar al mundo la belleza de nuestro país.
El sitio tienen muchas fotografías y videos de hermosos lugares de la zona oriental. «Cuando quiera conocer o saber de sitios turísticos de El Salvador puede ingresar a Elsalvadortodotuyo.com y buscar imágenes y videos para que tenga una idea de los lugares turísticos que pueden visitar en sus vacaciones», asegura este migueleño.

«No duden visitar estas páginas que fomentan el turismo. Hay turismo en nuestro país, hay varias formas en las que nos podemos recrear, hay aventuras que podemos descubrir en nuestro país y vivirlas. No es necesario ir más lejos (otros países) a buscar aventuras y a descubrir nuevas zonas cuando nuestro país las tiene. Hay playas lindas aquí en oriente: Las Tunas, El Icacal, playa Salinas, atrás del volcán de Conchagua. Hay muchos lugares que debes de descubrir», concluye. Nos despedimos de Romel esperando encontrarlo algún día en la carretera.

Paso lo que pasa

Hassan y Kim, dos cicloturistas alemanes que viajan en bicicleta desde México a Costa Rica y que pasaron por El Salvador.

Estábamos descansando cuando vimos llegar a Kim y Hassan, los cicloturistas alemanes que viajan desde México hasta Costa Rica. «Salimos a las 6:30 a.m. de Usulután, y de verdad que este tramo es duro», comenta Hassan. Nos pusimos a ver sus bicicletas a detalle y descubrimos que son unas bicicletas de gama media, menos de $400, con frenos de discos y sin amortiguadores. Ellos aseguran que las compraron usadas en México. Las bicicletas están equipadas con una parrilla de hierro cromado en la parte delantera y trasera, no llevan alforjas, sino que su equipaje lo sujetan con bandas elásticas. «Lo único caro que tienen estas bicicletas son los sillines, ya que los que traían no eran tan cómodos. Lo otro son las bolsas del timón, que son impermeables», dice Kim.
En su equipaje cargan cocina, tienda de campaña, ropa, herramientas, bolsas de dormir y varios contenedores para agua. Su viaje por El Salvador casi termina. Su destino final es el puerto de La Unión, en donde tomarán una lancha que los llevará hasta Potosí, Nicaragua. De nuestro país se llevan muy buenos recuerdos e incluso han hecho un hashtag que se llama #dontskipelsalvador (no se salten El Salvador) #itsawesomethere (es fabuloso ahí).
En su blog, Kim asegura: «Los primeros días en la bicicleta fueron bastante difíciles, especialmente cuando llegamos a la carretera montañosa en la costa, que es hermosa y muy pintoresca, pero también de constante subidas y bajadas. No hay trozos planos de carretera y provoca altos niveles de frustración, después de algunas horas luchando cuesta arriba, luego el descenso cuesta abajo y otra cuesta arriba. Eso es mentalmente difícil, pero especialmente difícil cuando no te sientes bien de salud», afirma Kim. En nuestra conversación en El Delirio, Kim me manifestó: «El Salvador tiene una reputación un tanto mala por ser uno de los países más peligrosos fuera de las zonas de guerra, lo que probablemente tiene alguna base de hecho, pero no se relaciona en absoluto con nuestra experiencia en ese país. La gente ha sido increíblemente acogedora y amable en todo el camino, y no nos hemos sentido inseguros en absoluto».
Justo terminando nuestro descanso cuando descubrimos dos cosas, la primera, que teníamos una llanta pinchada; y la segunda, es que nos volvimos a encontrar con Kim y Hassan, los cicloturistas alemanes, que recién venían llegando. Me alegré mucho en verlos y conversamos un rato sobre su experiencia en esta zona de El Salvador. ¨Mucho calor¨ dijo Hassan. Quien asegura que su origen es egipcio y que disfruta mucho de conocer lugares exóticos a golpe de pedal. Kim, todavía se recuperaba del fuerte del Lejano Oeste. Como no habíamos tenido mucho tiempo para conversar me contaron su peripecias en El Salvador. Resulta que entraron a El Salvador por la frontera La Hachadura procedentes de Antigua Guatemala. Luego pedalearon toda la carretera del Litoral durmiendo en Mizata, el Zonte y el Tunco en donde descansaron un par de días disfrutando de las playas salvadoreñas.
Posteriormente pedalearon hasta el Puerto de La Libertad en donde ¨Teníamos la esperanza de tomar un autobús a Usulután, pero nos dijeron que teníamos que tomar un autobús más pequeño a Comalapa y otro autobús desde allí. Subimos al autobús, pagamos nuestros cinco dólares (el conductor del autobús parecía demasiado feliz cuando se lo dimos) y comenzamos el viaje. Resulta que realmente no fue una elección inteligente. El autobús se detenía todo el tiempo, cada vez que hay alguien esperando en la carretera, los autobuses se detienen donde sea, aunque también hay paradas de autobús. Al final, los 30 km nos tomaron 1.5 horas y el camino había sido bastante plano y ciclable. ¡Qué fracaso!¨, comenta Kim en su blog.
Como cosas de la vida ese mismo día que acampé en el Jiboa ellos lo hacían cerca del mismo río pero sobre la carretera del Litoral. La mañana siguiente ellos salen de su campamento hacia Usulután que fue cuando los conocí por primera vez. Al ver sus bicicletas en realidad me di cuenta que muchas personas ponen excusas para no realizar viajes en bicicleta, muchas de ellas tienen que ver con el equipo, en el caso de esta pareja de cicloturistas sus bicicletas las compraron en México, no son bicicletas de gama alta, poseen unas parrillas hechizas de hierro cromado en las cuales, con bandas elásticas, sujetan su equipaje. La cosa es viajar y es lo que han hecho. Hubiésemos querido hablar con ellos más tiempo para conocer sus experiencias pero todos sabíamos que este trayecto iba a ser duro la media hora de descanso había finalizado así que me despedí de ellos, cuando me iba a subir a la bicicleta, me di cuenta de que la llanta trasera estaba pinchada. Me tocaría cambiarla. Este procedimiento siempre me pone nervioso porque, además de quitarme tiempo de mi itinerario, existen muchas probabilidades de que la llanta se vuelva a pinchar. Fue en ese momento en que Kim y Hassan se despidieron de mí, comprendía que para todos la escalada que se avecinaba era difícil, al menos dos horas pedaleando hacia arriba bajo el sol del mediodía. Me quedé reparando la llanta y tratando de hacer todo bien…. La verdad que cambiar llantas es mi delirio, pedalear no lo es.

 

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *