UN DÍA SIN AUTOS

 

El pasado 24 de septiembre Kilómetro Cero fue invitado a participar en un recorrido conmemorativo en bicicleta para celebrar el Día Mundial Sin Autos.

¿Qué es el Día Mundial Sin Autos?

Más de 300 ciclistas participaron de la pedaleada «Un día sin autos».
No importa la forma en la que se desplazaron, todos estuvieron felices por participar.

Se trata de una iniciativa que invita a los ciudadanos a dejar el carro por un día. En teoría, no deberían circular autos ese día y todos los ciudadanos deberíamos utilizar medios de transporte alternativos como la bicicleta, el transporte público o caminar. Aunque en El Salvador es el quinto año que se celebra, pocas personas conocen sobre este día, el cual busca transmitir el mensaje de que no tenemos por qué aceptar una sociedad dominada por los automóviles y generar, de esta manera, conciencia sobre la gran dependencia de los combustibles fósiles con la que vivimos.
Durante décadas se le ha dado total prioridad al automóvil y hemos abandonado otras alternativas de transporte. Es por esta razón que nuestras ciudades son más ruidosas, están más contaminadas y son más peligrosas; en gran medida, gracias al uso indiscriminado de los automóviles.
Según datos del Viceministerio de Transporte de El Salvador, en el último año hubo un incremento del parque vehicular de más de 75,000 carros, alcanzando la cifra de 925,264 vehículos en el país. Las motos no se quedan atrás, ya que en los últimos 10 años han alcanzado la cifra de 206,000 unidades; una moto por cada cinco autos. Por eso la movilidad a cualquier hora en el Gran Salvador es un caos y se vuelve cada vez más estresante y contaminante.
Este panorama no se presenta nada agradable, pero existe una alternativa de transporte que, de ser masiva, cambiaría y mejoraría por completo la calidad de vida de los capitalinos: la bicicleta. Es por esto que se celebra el Día Mundial Sin Autos, una fecha que busca crear esa conciencia para que uno mismo, aunque sea por un día, pueda experimentar y darse cuenta de lo diferente que podría ser su comunidad si más personas utilizaran medios alternativos de transporte.

No solo el tráfico en las calles de San Salvador es un obstáculo para desplazarse en bicicleta.
Muchos transeúntes, vendedores y automovilistas quedaron sorprendidos de la cantidad de ciclistas.

«No se trata de convertirnos en enemigos del auto, simplemente debemos ser conscientes de su uso», comenta Vicente Méndez, fundador de Pedaleando El Salvador, un colectivo de ciclistas que participaron en la actividad. Un factor necesario para generar cambios permanentes son las autoridades encargadas de legislar y crear políticas que incentiven el uso de medios alternativos de transporte. Este sí es un reto difícil, pero no imposible.
Muchos ciudadanos ya comienzan a estar cansados del tráfico, la contaminación, el estrés, y cada vez más los grupos de ciclistas se unen para organizar iniciativas como la Semana de la Movilidad Alternativa, en la cual se llevaron a cabo diversas actividades que tuvieron como objetivo sensibilizar a la población sobre esta forma de transportarse.

Francisco Antonio Álvarez.

Los movimientos pro bicicleta destacan los beneficios de su empleo: no contamina, no genera gases tóxicos, ahorra dinero y energía, no ocasiona congestionamientos y ayuda a la salud física y mental. Como eslogan de los ciclistas se encuentra el siguiente: «No contamina ni gasta gasolina. ¡Muévete en bici!». Y así lo hicieron los más de 300 ciclistas que participaron en esta actividad. «La bicicleta es lo mejor que hay, o sea, en el sentido de movilización, espacio, tiempo, parqueo –que es un problema– y la movilización en la carretera en sí. Es cierto que tenemos problemas con los automovilistas, pero de igual manera tratan ellos de respetar hasta donde ellos puedan… Yo salgo en bicicleta no para arruinar el tráfico, sino para tener un carro menos en la carretera», comentó Francisco Antonio Álvarez, de 65 años, uno de los participantes en la actividad.

¿Por qué el 22 de septiembre?

El eslogan preferido por los promotores de las bicicletas.

Se eligió el 22 de septiembre como el Día Mundial Sin Auto, ya que la fecha coincide con la Semana de la Movilidad de la Unión Europea. Sin embargo, existen ciudades alrededor del mundo que tienen su propio Día Sin Coche en otras fechas. Dos ejemplos son Bogotá y Medellín, que lo celebran el primer jueves de febrero y el 22 de abril, respectivamente. En nuestro país es el quinto año que se celebra el Día Mundial Sin Autos, pero, por primera vez, se celebró durante nueve días consecutivos, del 16 al 26 de septiembre, la Semana de la Movilidad Alternativa, en la cual se realizaron diversas actividades destinadas a promover la bicicultura. Entre ellas, se realizaron pedaleadas, foros, presentación de documentales y muchas actividades más que tenían como objetivo congregar a más de 10 grupos, organizaciones e iniciativas ciudadanas para que continúen trabajando para concientizar sobre el uso de los medios alternativos para movilizarse. Estos eventos fueron apoyados por La Alianza Francesa, La Casa Tomada, UES, UCA, la Matías, el CESTA, mujeres ciclistas, Pedaleando El Salvador, Ciclistas Urbanos y Conasevi, entre otras entidades.

La Dirección General de Tránsito montó un circuito de educación vial para que los niños aprendan a ser buenos peatones, ciclistas y, en un futuro, conductores.

Todas estas iniciativas, ya sea públicas o privadas, se aglomeran en una plataforma denominada Biciudad, la cual busca que todas ellas motiven a más ciudadanos para hacer uso de la bicicleta como medio de transporte alternativo. En la Semana de la Movilidad Alternativa también se tocaron temas sensibles, como un homenaje a los ciclistas muertos en las calles, un foro sobre la importancia del fomento del uso de la bicicleta en El Salvador, la proyección de un documental y la pedaleada del Día Mundial Sin Autos.
Asimismo, el viernes 22 de septiembre el Cesta entregó  dos piezas de correspondencia a la Asamblea Legislativa en las cuales pidieron el no ingreso de más vehículos usados al país y el mejoramiento en el transporte público para que sea amigable con el uso de las bicicletas.

 

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