Encuentro exitoso de usuarios y promotores de software libre en FLISOL El Salvador 2013

Más de 400 personas, entre voluntarios, empresarios, académicos, estudiantes, niños, técnicos, profesionales y aficionados al software libre participaron durante todo el día sábado 27 de abril en las instalaciones de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas en el Festival Latinoamericano de Software Libre FLISOL 2013, edición El Salvador.

Unos meses atrás, el Grupo de Software Libre UCA inició las gestiones institucionales y los preparativos de logística y convocatoria a las comunidades de software libre, organizaciones y empresas para desarrollar este evento. Se buscó y logró proveer espacios y momentos de convergencia de las personas que utilizan como herramienta de trabajo, parcial o totalmente, algunos de los miles de programas y aplicaciones que se hallan licenciados como software libre, con los interesados y neófitos, entusiastas y jóvenes ávidos obtener más conocimientos y conocer sobre las experiencias, buenas y malas, de otros.

Un recuento en fotografías

Las imágenes hablan más y mejor que las palabras, y a continuación se presenta una selección de fotografías que revela y deja testimonio de la secuencia de algunos de los momentos relevantes de la jornada.

Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén

La sencilla inauguración contó con la presencia del rector de la UCA, padre Andreu Oliva, y miembros del Grupo de Software Libre UCA, organizadores del evento. El auditorio del edificio D de la UCA no fue suficiente para dar cabida a todos los participantes, lo que refleja el éxito de la convocatoria realizada.

Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén
Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén

Las charlas, tanto locales como por medio de videoconferencias, tocaron distintos temas relacionados al uso y aplicación de títulos de software libre en ámbitos como negocios, artes gráficas, salud pública, desarrollo de software, herramientas ofimáticas y de colaboración, y muchos más.

Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén
Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén

El lugar donde se ubicaron los espacios en que las distintas comunidades para mostrar, compartir, instalar y enseñar los aplicativos que cada uno promueve lució repleto todo el día, con muchas personas yendo y viniendo, conversando, aprendiendo, discutiendo, intercambiando direcciones electrónicas y teléfonos, y probablemente concibiendo nuevos proyectos de colaboración mutua.

Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén

Los juegos de video instalados en plataformas libres y basados en software libre no podían faltar, y fue uno de los espacios que no tuvo momentos de ocio, por así decirlo.

Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén

Dentro del grupo de comunidades y empresas que mostraron sus productos y servicios se encontraron la Comunidad de Usuarios de openSUSE de El Salvador, el Ministerio de Salud, Grupo GNU/Linux UDB-EIC, Comunidad LinUES, Comunidad Salvadoreña de Software Libre, Comunidad Ubuntu, Raspberry Pi El Salvador, Comunidad de Software Libre UESOcc, Agencia de diseño web GPremper y Creativa Consultores.

Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén

Los niños también tuvieron un espacio donde se mostraron algunas aplicaciones en software libre diseñadas específicamente para estas edades.

Fotos y composición cortesía de Mauricio Guillén

La convivencia finalizó con momentos compartidos en comunidad donde se realizaron las rifas de productos promocionales, incluyendo un Arduino y una Tablet.

Grupo de Software Libre UCA – Foto cortesía de Mauricio Guillén

La pelota ha sido puesta a rodar nuevamente. Después de algunos años con una convocatoria menor, el país ha “re-descubierto” y reunido en un mismo lugar a los muchos usuarios y promotores de estas alternativas.

Seguramente el próximo año se repetirá un nuevo FLISOL en El Salvador, con más y mejores propuestas, a partir de lo que se logró compartir en este exitoso encuentro.

 

El Software Libre tiene su festival en Latinoamérica

El sábado 27 de abril de 2013, en forma simultánea, varias instituciones a lo largo de América Latina estarán celebrando el Festival Latinoamericano de Instalación de Software Libre (FLISOL). El Salvador acompañará este año este festival con varios eventos, siendo el principal el organizado por el Grupo de Software Libre UCA junto a otras comunidades de software libre, empresas y particulares interesados en el tema.

El Festival Latinoamericano de Instalación de Software Libre (FLISOL) es el evento de difusión de Software Libre más grande en Latinoamérica. Se realiza desde el año 2005 y desde el 2008 se adoptó su realización el cuarto sábado de abril de cada año. Su principal objetivo es promover el uso del software libre, dando a conocer al público en general su filosofía, alcances, avances y desarrollo. En esa fecha, las diversas comunidades locales de software libre en cada país, ciudad y localidad, organizan simultáneamente eventos en los que se instala, de manera gratuita y totalmente legal, software libre en las computadoras que llevan los asistentes.

En el país, gracias al aporte de Asociación Conexión, se cuenta a partir de este año, con un logo salvadoreño del FLISOL, elaborado a partir del logo original del evento, ilustrado con un torogoz, el ave nacional que retrata la libertad. Cuenta con licencia de Creative Commons y está disponible para su uso abierto.

Software libre, fuente abierta o código abierto

El Software Libre se refiere a la libertad de los usuarios para ejecutar, copiar, distribuir, estudiar, cambiar y mejorar el software. Se consideran las siguientes libertades:

  • Usar el programa con cualquier propósito (libertad 0)
  • Estudiar cómo funciona el programa y adaptarlo a las propias necesidades (libertad 1)
  • Distribuir copias con las que se pueda ayudar a otros (libertad 2)
  • Mejorar el programa y liberar las mejoras al público (libertad 3)

Un error común es pensar que “libre” es sinónimo de “gratis”. El origen de esta confusión es que en inglés, “free” se refiere tanto a la libertad como a la gratuidad, algo que en español se puede diferenciar. Por esta razón, se usa también el término de “fuente o código abierto” (“open source” en inglés) para hacer énfasis en las libertades mencionadas arriba, que requieren contar con el código del programa original.

Estos conceptos, que combinan la tecnología, la ética y la filosofía, contienen elementos controversiales que pueden dar pauta a largas e interminables discusiones, así como a tomar posiciones que pueden llegar a ser extremas. La forma en que se ha concretado la decisión de cada autor de piezas de software es por medio de licencias, de las que existen por un lado las privativas y por otro las de Creative Commons, que abren las posibilidades para mantener y propagar las libertades.

FLISOL en El Salvador

El FLISOL salvadoreño se desarrolla en la Plaza de los Estudiantes y el auditorio del edificio D, en el interior del campus de la UCA, de 8 am a 6 pm, y la entrada es libre.

Participan la Universidad Rey Juan Carlos, Universidad Complutense de Madrid, la Comunidad de Usuarios de openSUSE de El Salvador, el Ministerio de Salud, Creative Commons El Salvador, Grupo GNU/Linux UDB-EIC, Comunidad LinUES, Comunidad Salvadoreña de Software Libre, Raspberry Pi El Salvador, Comunidad de Software Libre UESOcc, Agencia de diseño web GPremper y el Grupo de Software Libre UCA, principal organizador. Contribuyen como patrocinadores la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, Asociación SVNet y Creativa Consultores.

Algunas actividades que se llevarán a cabo:

  • Obtener CD y DVD con software libre en los stands dedicados a las Distribuciones GNU/Linux y Software Libre más populares.
  • Visitar e interactuar con expertos de OpenSuse, Ubuntu, Debian, Android, Software Libre para diseño gráfico profesional, Software Libre para niños, Embebidos (Raspberry Pi), Arduino.
  • Utilizar espacios donde los visitantes podrán acercarse con sus computadoras personales a instalar software libre.
  • Atender ponencias sobre temas y proyectos relacionados al software libre. Entre ellas, la videoconferencia «Modelos de negocio del Software Libre” impartida por el español Jesús M. González Barahona».
  • Competir en mesas de juegos libres multijugador.
  • Participar en rifas de artículos promocionales.

El papel del Software Libre

El Software Libre está aun en etapas tempranas en nuestro país. Además de descargar, utilizar y adaptar los títulos que están disponibles en la red y otros medios de distribución, aun falta presentar más aportes totalmente originales de nuestro país al mundo del código abierto. No se trata solamente de recibir y aprovecharse, sino también de dar y contribuir. Ese es el sentido completo del Software Libre.

También es importante conciliar el espíritu libertario de los creadores de estos movimientos, el idealismo y la solidaridad que alienta ese trabajo, con las posibilidades de generar ingresos y sostenibilidad financiera para los profesionales y técnicos que se dedican a promover el software libre. Estos y otros temas se incluyen en el mapa conceptual del software libre.

Pasos como la formación del Grupo de Software Libre UCA, la celebración del FLISOL en nuestro país, la presencia concurrente de las diversas comunidades que promueven el uso del Software Libre, y las conferencias que se impartirán en el festival son importantes para seguir introduciendo el tema entre estudiantes y demás miembros de la comunidad universitaria, profesional y empresarial.

Las iniciativas aisladas y, en muchos casos, personales, aunque son buenas, deben ser coordinadas y acompañadas por otros tipos de estímulos y apoyos, tanto por empresarios como por instituciones académicas y públicas, para que cada persona interesada identifique su papel y las posibilidades que tiene para hacer negocios sostenibles aprovechando, sin tergiversar los principios de libertad, las ventajas de compartir el código fuente abierto.

 

El primer Parque Tecnológico en El Salvador

Los historiadores atribuyen al filósofo y científico inglés Francis Bacon la frase “la ciencia es poder”. Aunque más recientemente la hemos utilizado como “el conocimiento es poder”, el hecho que dicha afirmación trata de reflejar prevalece: las personas, las empresas y los países que desarrollen la ciencia y el conocimiento tendrán la facultad de decidir sobre su destino y obtener mejores condiciones de vida.

En los tiempos actuales, para que este axioma sea efectivo, es necesario que exista una relación vinculante y eficaz entre el desarrollo y acumulación de conocimiento, la ciencia y la tecnología, y la producción industrial y comercial de bienes y servicios que permita la obtención de recursos, sobre todo del exterior, a cambio de esos bienes y servicios generados a partir del conocimiento aplicado.

Una opción para lograr esta sinergia e intercambio de información y conocimiento entre el mundo científico y el mundo empresarial es la conformación de Parques Tecnológicos, espacios físicos en los que es posible que la experimentación e investigación convivan con la comercialización y la producción industrial, generando ingresos financieros para todos los involucrados.

Aunque existen muchos en varios países del mundo con variantes importantes en extensión, formas de trabajo, políticas, socios y apoyos, el desarrollo, mantenimiento y fortalecimiento de Parques Tecnológicos es un mecanismo por el que entidades públicas y/o privadas, pueden desarrollar productos y servicios novedosos e innovadores, pasando en breve plazo a la fase de concepción de la versión comercializable de los mismos.

La primera semilla en el país

El 11 de abril de 2013 fue inaugurado oficialmente el Parque Tecnológico en Agroindustria (PTA), en las instalaciones del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal “Enrique Álvarez Córdova” (CENTA), en el kilómetro 33.5 de la carretera a Santa Ana.

Este organismo de investigación, en alianza con la Escuela Nacional de Agricultura “Roberto Quiñónez” (ENA), los ministerios de Educación y Agricultura y Ganadería, bajo la coordinación general del Viceministerio de Ciencia y Tecnología, desde su unidad especializada en Parques Tecnológicos, han unido personal, recursos, infraestructura y experiencia para hacer realidad esta iniciativa.

Los objetivos del PTA son, de acuerdo a su planteamiento oficial:

  • Crear los mecanismos para el registro de patentes y la protección de la propiedad intelectual.
  • Crear Centros de Transferencia Tecnológica y del Conocimiento, donde se fomente el emprededurismo y cuyos resultados se puedan traducir en productos salvadoreños de alto valor agregado que mediante acuerdos mutuamente beneficiosos se pondrán a disposición de la empresa para su escalado de producción y propiciar el incremento de la productividad empresarial y un mayor desarrollo socio-económico.
  • Buscar alianzas estratégicas entre los centros de investigación, instituciones de educación superior y la empresa privada, donde se potencie el intercambio de investigadores e investigaciones a nivel nacional e internacional, para fortalecer la innovación de proyectos de investigación en agroindustria.

Ya hay productos desarrollados

Tanto el CENTA como la ENA tienen varios años de existir en el país. Han venido desarrollando su labor con los recursos que han obtenido en el transcurso del tiempo, y así es posible encontrarnos con más de 30 productos provenientes de la investigación, formulación y experimentación agrícola, que se encuentran listos para su comercialización por parte de empresas e inversionistas interesados.

Algunos de estos productos ya han sido envasados y empacados en contenedores apropiados, con etiquetas que lucen el logo del PTA, como muestras para que dicho empaque sea refinado y adecuado a la empresa que desee explotarlos comercialmente, pagando las regalías correspondientes al Parque Tecnológico, de forma que éste pueda apoyarse en esos ingresos para desarrollar más investigación, formación de recurso humano y, eventualmente, más nuevos productos.

La tortilla chip de frijoles es una hojuela frita de textura crujiente preparada con harina de maíz QPM nixtamalizado y harina de frijoles biofortificados. El maíz proporciona proteínas y el frijol minerales como hierro y zinc.

Las tostadas de camote son hojuelas fritas, de textura crujiente, con sabor ligeramente dulce y de colores amarillo y anaranjado, que por su alto contenido de betacarotenos son fuente de vitamina A.

Las láminas de fruta se obtienen a partir del puré de pulpas de frutas, solas o combinadas, que se deshidratan en capas delgadas.

La miel de abeja, la mermelada de rosa de Jamaica, los chicharrones y el queso cheddar son otros productos que el PTA está produciendo.

El siguiente paso y noticia que debemos conocer para que el PTA sea un verdadero Parque Tecnológico es que ya algunos de sus productos están siendo comercializados por empresas privadas y que, en conjunto con los investigadores y estudiantes de CENTA y ENA, los industriales están generando riqueza para nuestro país y con ella, un mejor nivel de vida para sus habitantes.

 

El CONACYT ha muerto. Viva el CONACYT

Después de 20 años de existencia, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) de El Salvador ha sido formalmente derogado, según decreto legislativo 234 aprobado por la Asamblea Legislativa, y publicado en el Diario Oficial el 19 de febrero de 2013.

El proceso fue detalladamente planificado durante varios años, y el primer gran paso ocurrió en julio de 2011, cuando se aprobó el decreto que derogó todas las actividades, funciones y obligaciones que tenía el CONACYT en materia de calidad, creando el Consejo Nacional de Calidad, y sus cuatro institutos especializados, a los que se le trasladaron dichas funciones en el área de calidad.

Por casi dos años, de 2011 a 2013, el CONACYT continuó siendo una entidad autónoma con una junta directiva multisectorial, enfocada solamente en los temas de ciencia y tecnología, trabajando en estrecha relación con el Viceministerio de Ciencia y Tecnología, adscrito al Ministerio de Educación.

La gestión y nombramiento de la junta directiva concluyó en diciembre de 2012, y en febrero de este año, finalmente, se derogó el decreto 287 de fecha 15 de julio de 1992, con lo que se cierra el ciclo de vida del primer CONACYT de El Salvador.

Un nuevo CONACYT

De inmediato, con fecha 1 de marzo de 2013, el Ministro de Educación ha emitido un decreto ministerial que, como elemento principal, da vida a un nuevo CONACYT, como una entidad desconcentrada de dicho ministerio, y a cargo del Viceministerio de Ciencia y Tecnología, y encargada fundamentalmente de las funciones que antes tenía a su cargo el CONACYT anterior.

Por decreto, la presidencia del nuevo CONACYT está a cargo del viceministro o viceministra de Ciencia y Tecnología, y la unidad cuenta además con un Consejo Técnico Consultivo, un director ejecutivo y los gerentes de área, jefes y personal de las áreas administrativas, operativas y de asesoría.

Todo el personal del CONACYT, desde el director ejecutivo, así como los jefes, gerentes y personal ejecutivo y operativo, será nombrado por el presidente de CONACYT, concentrando esta facultad en una persona.

El presupuesto de funcionamiento de esta unidad estará incluido en el asignado al ramo de Educación, a través de su ministerio, y podrá recibir donaciones y aportes de cooperaciones internacionales.

Diferencias entre ambos CONACYT

Por supuesto, la naturaleza y características de ambas instituciones tienen algunas diferencias entre ellas que, según la perspectiva de cada observador, pueden ser ventajas o limitaciones.

Para comenzar, el anterior CONACYT era una institución autónoma, adscrita al Ministerio de Economía; el nuevo CONACYT es una unidad desconcentrada del Ministerio de Educación. La entidad del ejecutivo a la que está adscrita esta dependencia refleja el enfoque que se busca otorgarle: al estar adscrito a Economía, el CONACYT enfocó muchos esfuerzos a buscar y fomentar la productividad industrial y empresarial por medio de la calidad, la ciencia y la tecnología. Al cambiar su adscripción a Educación, y no tener entre sus funciones los temas de calidad, puede enfocarse más a la ciencia, innovación y tecnología por medio de la investigación, pura y aplicada.

La gestión estratégica del anterior CONACYT estaba confiada a una junta directiva plurisectorial, conformada por 10 directores propietarios e igual número de suplentes, provenientes de los sectores público, privado, académico y profesional, propuestos por las gremiales e instituciones del sector respectivo. El nuevo CONACYT contará con un Consejo Técnico Consultivo, también plurisectorial, formado por 7 consejeros y sus respectivos suplentes, con la diferencia de que algunos espacios ya están pre-asignados (el viceministro de ciencia y tecnología, que preside, el director nacional de investigación del Viceministerio de Ciencia y Tecnología y un representante de la Universidad de El Salvador; los restantes 4 cargos son para las demás universidades, los centros de investigación y 2 para el sector privado).

Adicionalmente, la Junta Directiva del anterior CONACYT era la autoridad máxima real y formal de la entidad autónoma; el Consejo Técnico Consultivo (CTC) del nuevo CONACYT solamente puede sugerir y apoyar las acciones de la nueva entidad. El artículo 13 del decreto deja bien claro que el presidente de CONACYT escuchará y considerará las resoluciones del CTC, “pero en ningún caso serán vinculantes”.

Al ser parte de una entidad mayor, el Ministerio de Educación, el nuevo CONACYT recibirá sus fondos de esta entidad, a diferencia del anterior CONACYT, que tenía un presupuesto separado, y que se mantuvo con un techo bastante bajo todos los años de su operación.

El nuevo CONACYT no tiene entre sus funciones asesorar al presidente de la República en temas relativos a sus funciones, como lo tenía el anterior, aunque en sus 20 años nunca fue requerido en tal función por la presidencia nacional.

El nuevo CONACYT está en su proceso de formación y consolidación. Tendrá una estructura jerárquica, administrativa y operativa distinta, lo que, dependiendo de lo que se haga y, sobre todo, de su orientación estratégica, podrá establecer la diferencia real con el anterior. El tiempo, los resultados y la evolución de la ciencia, innovación, tecnología e investigación en El Salvador nos revelará la madurez y razón de estas decisiones.

El CONACYT ha muerto. Retomemos su legado y hagamos que viva el CONACYT.