Archivo por meses: junio 2009

EL ÉXITO ES FRUTO DEL SACRIFICIO

Muchas veces, nos hemos preguntado cuál es la clave del éxito o qué hacer para ser buenos cristianos y líderes a la vez. Ya sea en nuestro hogar, en nuestra comunidad religiosa o en el trabajo, necesitamos desarrollar algunas virtudes para dirigir o tomar decisiones con la sabiduría que Dios Padre, a través de su Espíritu Santo, nos da.

Como en los artículos anteriores, quise fundamentarme en las Sagradas Escrituras. En ellas, encontré la historia de Moisés un ejemplo perfecto de que el sacrificio es la clave del éxito.

Este personaje comenzó su vida como el príncipe de Egipto. Él tenía todo lo que un joven podría desear: dinero, poder, placer y mucho más; pero el conocer que sus hermanos hebreos estaban sufriendo en manos de los egipcios, lo impulsó a hacer algo al respecto. Después de matar a un egipcio agresor, Moisés pensó que podría vengar a su pueblo mientras permanecía en el palacio, como parte de la familia real. Al descubrir que este crimen se había hecho de conocimiento común (aun para el Faraón) Moisés comprendió que tenía que huir. Fue durante su tiempo en el desierto que él aprendió que un líder debe también renunciar a ciertos privilegios o comodidades y confiar en Dios.

Una vez se despojó de los beneficios que su investidura egipcia le confería, Moisés experimentó el favor de Dios y fue llamado a realizar el trabajo mediante métodos divinos en vez de humanos. Moisés no hubiera podido nunca realizar su tarea sin renunciar a su posición principesca.

De igual manera, tú debes abandonar el orgullo, impaciencia, soberbia, autosuficiencia, posición, control, popularidad, tiempo y comodidad, que a veces te alejan de Cristo, te confunden y no te permiten ver con claridad lo que está pasando en tu vida.

Ahora bien, si tu pregunta es ¿qué permitió a Moisés renunciar a todo?, reflexiona los siguientes puntos y encontrarás la respuesta.

SE ENCONTRÓ CON DIOS

Dios alejó a Moisés de todo aquello que constituía su propia seguridad. Él removió sus distracciones. “Oyendo Faraón acerca de este hecho, procuró matar a Moisés; pero Moisés huyó de delante de Faraón, y habitó en la tierra de Madián. Y estando sentado junto al pozo, … Apacentando Moisés las ovejas de Jetro su suegro … se le apareció el Ángel de Dios en una llama de fuego en medio de una zarza …” Existen ocasiones en la que debemos dejarnos llevar por Dios a nuestro propio desierto para encontrarnos con él y con nosotros mismos.

FUE SINCERO CON DIOS

En su encuentro con el Señor no busca el engaño o la justificación, Moisés se reconoce débil ante un Dios todo poderoso. Así mismo, tú debes reconocer tus dificultades y analizar qué debes sacrificar para superarlas. Cuando lo hagas y como Moisés digas: ¿Quién soy yo para que vaya a Faraón y saque de Egipto a los hijos de Israel? Entonces, escucharás una voz que te responde: Ve, porque yo estaré contigo …

Abraham, es otro ejemplo de que el sacrificio, ofrecido a Dios con amor, es la clave del éxito. Él también abandonó las seguridades que le ofrecía su país, su raza y su familia, (Cf. Gn 12,1) estuvo dispuesto incluso a sacrificar a su hijo se era necesario y por ello Dios le hará una de las promesas más impactantes del antiguo testamento “…tú serás el padre de una multitud de naciones. No te llamarás más Abram sino Abraham, pues te tengo destinado a ser padre de una multitud de naciones. Te haré fecundo sin medida, de ti saldrán naciones y reyes, de generación en generación. Pacto mi alianza con tigo y con tu descendencia después de ti: esta es una alianza eterna. Yo seré tu Dios y, después de ti, de tu descendencia.”


Para finalizar, quiero que busques muy dentro de tí y con toda franqueza te respondas ¿qué he sacrificado para convertirme en un autentico líder?, ¿cuáles han sido algunas experiencias de mi pasado donde Dios me llamó a entregarle algo para bien mío y de los que me rodean?, ¿cómo respondí?, ¿le he permitido a Dios que me lleve al desierto para romper la auto suficiencia y la auto promoción que hay en mi vida?, ¿a qué cosas me estoy aferrando que no me permiten alcanzar la felicidad y el éxito?

Recuerda, si existiera la necedad en Dios, sería más sabia que nuestra sabiduría, aprende a confiar en Él.

¿EXISTEN LOS ÁNGELES?

Es frecuente oír hablar de ángeles, y es muy probable que en medio de tantas opiniones resulten algunas herejías que pretendan distorsionar la verdadera función de ellos.

Como lo digo en muchas ocasiones, Dios ha creado seres para que le adoren eternamente. No los vemos ni los tocamos, sin embargo están ahí. Según la Sagrada Escritura, los ángeles, en cuanto criaturas puramente espirituales, se presentan a la reflexión de nuestra mente como una especial realización de la ‘imagen de Dios’, Espíritu perfectísimo. Los ángeles son, desde este punto de vista, las criaturas más cercanas al modelo divino. Su nombre proviene del latín angelius que significa mensajero.

Para entender mejor el papel que desempeñan los ángeles en la creación, es preciso hacer un breve recorrido por las sagradas escrituras, las cuales destacan desde el Antiguo Testamento la especial participación de los ángeles en la celebración de la gloria que el Creador recibe. Los Salmos, de modo especial, se hacen intérpretes de esa voz cuando proclaman “Alabad al Señor en el cielo, alabad al Señor en lo alto. Alabadlo, todos sus ángeles”.

En el Nuevo Testamento, también el Señor pone de relieve las tareas de los ángeles respecto a la misión de Cristo como Mesías y, ante todo, con relación al misterio de la encarnación del Hijo de Dios. Así también, la presencia de los ángeles está en la narración de la anunciación del nacimiento de Juan Bautista , de Cristo mismo, en las explicaciones y disposiciones dadas a María y José , en las indicaciones dadas a los pastores la noche del nacimiento del Señor y en la protección del recién nacido ante el peligro de la persecución de Herodes.

Más adelante, los Evangelios hablan de la presencia de los ángeles durante el ayuno de Jesús en el desierto a lo largo de 40 días y durante la oración en Getsemaní. Después de la resurrección de Cristo será también un ángel, que se aparece en forma de un joven, quien dirá a las mujeres que habían acudido al sepulcro y estaban sorprendidas por el hecho de encontrarlo vacío: “No os asustéis. Buscáis a Jesús Nazareno, el crucificado; ha resucitado, no está aquí. Pero id a decir a sus discípulos”. María Magdalena, que se ve favorecida por una aparición personal de Jesús, ve también a dos ángeles.

Los ángeles han estado presentes en todos los grandes acontecimientos de la historia de la salvación, recuerden como se presentan a los Apóstoles después de la ascensión de Cristo para decirles: “Hombres de Galilea, ¿qué estáis mirando al cielo? Ese Jesús que ha sido arrebatado de entre vosotros al cielo, vendrá como le habéis visto ir al cielo”. Son los ángeles de la vida, de la pasión y de la gloria de Cristo.

Si pasamos a la nueva venida de Cristo, es decir, a la “parusía”, hallamos que todos los evangelios sinópticos hacen notar que el Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre con los santos ángeles. En la descripción del juicio final se habla también de la presencia de ángeles.

Se puede decir, por tanto, que los ángeles, como espíritus puros, no sólo participan en el modo que les es propio de la santidad de Dios, sino en los momentos clave, rodean a Cristo y lo acompañan en el cumplimiento de su misión salvífica.

Los ángeles también están contigo, ya que son creaturas destinadas, en muchos casos, a la protección personal de los seres humanos. A ellos se les denomina ángeles custodios. Como nos recuerda el Salmo 90: “A sus ángeles ha dado órdenes. Te llevarán en sus palmas para que tu pie no tropiece en la piedra”. Por eso me atrevo a decirte que Dios ha creado un ser especial para ti, para tu cuidado, para tu auxilio, para que en esos momentos de tribulación, cuando sientas que ya no puedes, te ayuden a seguir el camino trazado por Él para tu salvación. Y así gozar de su presencia y unirte al coro de los ángeles en el cielo para cantar sus alabanzas.

Dios te bendiga…