AUSTERIDAD DEL CUERPO

Como la palabra austeridad ya se puso de moda en nuestro paí­s. Y digo la palabra, porque la situación siempre ha existido; al menos en la población. Para el gobierno va a comenzar ha ser algo nuevo.
Otra vez creo que es una situación reactiva como comúnmente estamos acostumbrados nuestros paí­ses  â€œen ví­as de desarrollo”. Las últimas técnicas de reducción de presupuestos de los gobiernos y hasta de las empresas van a ir desde la gasolina hasta el papel higiénico que usan las mujeres.
Nuevamente por este blog quiero resaltar que cualquiera reacción austera que se pueda tomar, no se podrá comparar jamás en términos económicos y de calidad de vida, a un programa activo de constante cuidado fí­sico.
Si se hiciera un cálculo de cuanto invierte el gobierno en medicinas para personas que padecen de hipertensión, diabetes, debilidad, estrés, impotencia, y las demás enfermedades relacionadas al sedentarismo, se darí­a cuenta de cuanto pudiera ahorrar si se implementaran programas preventivos. Si también hiciera un cálculo de cuantas horas de trabajo pierden los empleados en asistir a citas al ISSS y en horas de incapacidad, creo firmemente que serian números verdaderamente espantosos.
Pero, por qué no pensar también en aplicar los principios de austeridad en el cuerpo fí­sico. Imagí­nese cuanta energí­a consume usted en alimentos que después se tienen que acumular en forma de “tuches” í² el hecho de no optimizar su energí­a moviéndose aunque sea parcialmente durante el dí­a con alguna forma de ejercicio. Aplicar los principios de austeridad en el cuerpo humano llevarí­an a cualquiera a obtener la figura que quieres decir: Gastar la energí­a acumulada e ingerir únicamente la energí­a necesaria para realizar las actividades del dí­a le dará a usted la apariencia fí­sica que quiere. Pero esto no es fácil, se debe crear una especie de déficit corporal para que el cuerpo vaya cediendo e ir eliminando la grasa acumulada por años. Loo principal que debe tener usted para esto es persistencia y constancia.