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Posts Tagged ‘dinero’

enero 13th, 2010

¿Qué me están cobrando? (segunda parte)

En la entrada anterior hablábamos sobre las ventajas de ser metódico a la hora de revisar nuestras cuentas, antes de pagarlas. Aunque el ejemplo más cotidiano y práctico con las compras del supermercado, esto aplica a diferentes áreas de nuestra economía.

Un área en la que debemos tener especial cuidado son las tarjetas de crédito. Conozco a una señora —mi ídolo personal, debo admitirlo—, que lleva anotado en una libretita el día, hora y monto de cada pago que hace, guarda cada voucher que le dan de sus tarjeta de débito —y sí, la doña detesta las tarjetas de crédito—, las acomoda en un fólder, y las coteja con el estado de cuenta que exige al banco cada mes.

Este hábito es realmente el deber ser de todo usuario de tarjetas. Pero aunque no tengamos esa disciplina, sí es necesario que, al menos, escudriñemos con pinzas los estados de cuenta que nos envía el emisor de la tarjeta.

En el estado de cuenta hay diferente información, muy valiosa, que debemos tener presente:

  • Al reverso, por ejemplo, los bancos incluyen en letra pequeña datos comonuestro saldo promedio mensual, la tasa deinterés anual que nos aplican, el interés que nos cobrarían por caer en mora, o el costo de hacer un retiro en efectivo.
  • En la parte del frente, un poco más visible, está nuestro saldo de contado —el cual, si pagamos en su totalidad, nos libra de sumar intereses—, nuestro pago mínimo —que en lo posible hay que superar en nuestro abono, para poder ir disminuyendo la deuda—, y eldetalle de cuánto de este pago mínimo irá a intereses y cuánto a pago decapital.
  • Finalmente, está la lista de cargos y abonos. Aquí aparecen, con fecha y monto, las compras que hayamos realizado. Si de pronto tenemos un cargo de un restaurante elcuál jamás en nuestra vida hemos visitado, es unaseñal de alerta. Si nos aparece un cobro duplicado, también hay que reclamar.

 Por eso es importante guardar los vouchers —aunque no los clasifiquemos y sumemos, como mi amiga—, porque son el respaldo para hacer cualquier reclamo. Además, en este listado de cargos y abonos pueden aparecer otros cobros que realiza el banco: el cargo por la renovación de la tarjeta, o el cobro por membresía, por ejemplo, que se añaden a la cuenta generalmenteta una vez por año.

Es importante saber que la muchos de los emisores de tarjetas están dispuestos a revertirnos este cobro de membresía o costo de la tarjeta, de forma total o parcial, si le hemos dado un buen uso a la misma, y hemos sido clientes cumplidos.

El propietario de una tarjeta en mora, o que ha estado inactiva por varios meses, difícilmente va a lograr una reversión, pero alguien disciplinado, que la usa regularmente y tiene sus pagos al día, puede conseguir que se le anule el cobro, una parte del mismo, o que el banco le ofrezca algo para compensarle, como un vale de supermercado o de gasolina.

Otros cargos, como los planes contra robo y fraude, también pueden aparecer en el estado de cuenta. Aunque estos planes constituyen una especie de seguro para evitarnos costos en caso de que la tarjetasea robada o clonada, no es obligatorio pagarlos, y elcliente puede solicitar que estos cobros se le reviertan.

Y usted, ¿es de las personas disciplinas que archivan sus vouchers? ¿O tiene su billetera repleta de papelitos amarillos apuñados? ¿Ha encontrado usted algún cobro extraño en su estado de cuenta? Compártanos su experiencia.

 

Las tarjetas de crédito, usadas correctamente, son un buen instrumento financiero.

Las tarjetas de crédito, usadas correctamente, son un buen instrumento financiero.

enero 12th, 2010

¿Qué me están cobrando? (primera parte)

 En mi casa, la revisión de las cuentas era considerada una señal de mezquindad.  Cuando veíamos a alguien revisar religiosamente cada factura, recibo o ticket que llegaba a sus manos, saltaba nuestro estigma familiar contra la tacañería.

A mí la experiencia me entró por el pellejo: solía agarrar el comprobante de compra, junto con mi vuelto, con elegante indiferencia, y apretujar todo dentro de mi billetera. Un día, por pura curiosidad, saqué el ticket del supermercado cuando ya estaba en casa, y me di cuenta de que me habían cobrado dos veces un paquete de detergente. ¡Eran $9.15 cobrados de más!

Desde entonces, reviso con lupa cada cobro que me hacen. Eso es sumamente útil. Si uno se toma el tiempo para chequear los comprobantes, puede verificar una serie de aspectos que pueden librarnos de pagar de más:

 

  • Si le han cobrado lo que uno efectivamente lleva
  • Si los precios de la viñeta son los mismos que nos han marcado —porque pasa, y seguido, que a los productos les dejan un precio puesto, y la máquina cobra otro diferente— a la hora de hacer el cobro.
  • Si realmente nos han hecho efectivos los descuentos y las ofertas ofrecidas. En mi caso, encontré varias veces que los famosos “2×1” no me los cobraban como tales.

 

Además, al hacer esta revisión dentro del mismo establecimiento, y al momento de la compra, se facilita hacer cualquier reclamo. Cuando llegué al supermercado con mi cara verde y mi reclamo de un detergente cobrado de más, tuve que pasar por toda la jerarquía administrativa de la tienda para que me devolvieran mi dinero.

Otra técnica útil, aunque requiere más tiempo, es ir a hacer las compras con una calculadora, e ir sumando los montos de lo que vamos tomando. Así, al llegar a la caja, tenemos ya hecha nuestra propia cuenta… si a la cajera le sale una cifra mayor, estamos listos para pedir que revise el detalle.

La Defensoría del Consumidor realiza sondeos periódicos en los establecimientos, para verificar que los productos tengan el precio a la vista, que es un requisito establecido en la Ley de Protección al Consumidor. Si usted no está seguro de un precio, se debe consultar a los empleados, y hay supermercados que cuentan con estaciones con un scanner de código de barras, en el que se puede verificarlos.

Y usted, ¿cuida el detalle de sus cuentas? ¿Ya le ha pasado que le cobran más de la cuenta? Cuéntenos sus experiencias.

Los productos en los supermercados deben tener el precio marcado de forma visible.
Los productos en los supermercados deben tener el precio marcado de forma visible.
enero 12th, 2009

Bienvenidos

El ahorro es una de esas cosas —como el ejercicio o la alimentación sana— que todos consideramos buenas, pero que no muchos practicamos.  Muchas veces no es algo voluntario. Ni siquiera es nuestra culpa. La falta de información es, como en infinidad de otras áreas de nuestra vida, la que nos lleva a cometer errores.

Soy Mariana Belloso, editora de la sección de Economía de La Prensa Gráfica, y la razón de ser de este blog es, precisamente, tratar de concentrar información y datos útiles para poder ahorrar, centavo a centavo, cosa por cosa, algo que a la larga puede hacer una importante diferencia en nuestros presupuestos personales y familiares.

Muchas veces se trata de cosas simples, tan simples que pueden parecer obvias, pero que por eso mismo se nos pasan de largo. Serán bienvenidos todos los aportes que usted como lector nos quiera dar: sus experiencias, sus tips personales, todo lo que pueda abonar a este objetivo común de obtener más por menos dinero.

Sirva esta pequeña reflexión como introducción para este blog, preparado desde la Redacción de Economía de La Prensa Gráfica, pensado para ser también su espacio. ¡Bienvenidos!

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