Compartamos una reflexión de santo Evangelio de este domingo 17 de julio, tomado de San Mateo 13, 24-30
En aquel tiempo, Jesús propuso otra parábola a la gente:
–«El reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero, mientras la gente dormía, su enemigo fue y sembró cizaña en medio del trigo y se marchó. Cuando empezaba a verdear y se formaba la espiga apareció también la cizaña. Entonces fueron los criados a decirle al amo:
“Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde sale la cizaña?”
Él les dijo:
“Un enemigo lo ha hecho.”
Los criados le preguntaron:
“¿Quieres que vayamos a arrancarla?”
Pero él les respondió:
“No, que, al arrancar la cizaña, podríais arrancar también el trigo. Dejadlos crecer juntos hasta la siega y, cuando llegue la siega, diré a los segadores:
‘Arrancad primero la cizaña y atadla en gavillas para quemarla, y el trigo almacenadlo en mi granero.'”»
Palabra del Señor.
Que atemorizante puede resultar esta parábola de la cizaña hoy en nuestros días en que la avaricia y sobresalir a costa de quien sea es lo primero. Muchos podemos estar tranquilos y decir: Si digo o hago esto o aquello no causa ningún mal porque otros lo hacen y están como si nada.
No obstante, debemos tener en cuenta que la recompensa será al final y creo que ni tú ni yo queremos estar en la hoguera. Con este comentario, no quiero sembrar terror ni nada por el estilo. Solamente deseo hacer un click a tu mente para que reaccionemos ante esta realidad. Recordemos que toda causa tiene su efecto. Si haces bien, recibes bien. Si haces el mal, ¿qué crees que recibirás?
Gracias por la reflexión, es verdad, Dios tarda pero no olvida y nos deja a nuestra libertad pero mucha veces es libertinaje, todos estamos llamados a la santidad, y esa es nuestra lucha diaria, siempre hay que optar por el bien.
Como cosa rara, ya había escrito parte de unos pensamientos y solo por un par de segundos me levante de mi silla a alcanzar algo y se borró lo que había escrito, sin tocar ninguna tecla de la computadora; así creo que el maligno aprovecha, en todo momento está al acecho, no solo en la noche, cuando nuestro cuerpo descansa de nuestras actividades diarias, espera que nos durmamos, también espiritualmente, haciendo uso de sus artimáñas, ocupando cualquier tipo de distractores. Yo el freno que me ponia, era el decir que no me gustaban los compromisos, y creía que con solo el ir a misa, a veces a la hora santa era suficiente; pero cuando se conoce a Cristo, vemos que la vida en el es la mas llena que podemos encontrar, que nos llena más que ver un partido, mas que un paseo o que el disfrutar de otros placeres del mundo; el llenarnos espiritualmente y que Dios tome nuestra vida como suya, es lo más lindo que he conocido de todos los placeres. Hermanos no nos durmamos espiritualmente o va a llegar el enemigo y sembrará cizaña.
El enemigo no descansa, siempre esta al acecho, por eso debemos tratar de no soltarnos de la mano de Dios, es muy dificil ya que somos tan debiles, pida por todos nosotros Padre lo necesitamos mucho.
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desean entra en pequeños negocios. Por que’ este tipo de ayuda no se ha extendido a tantas comunidades pobres de El Salvador ?
La iglesia cato’lica deberia de ser mas dinamica en estos asuntos…