«AMIGO DE LOS MUERTOS»

Cuenta la historia que en el cementerio general de San Salvador en horas de la tarde cuando el sol está cayendo y bañando destellos dorados en los cerros, una joven aguardaba con temor por alguien que la acompañaba a cruzar el anteriormente mencionado lúgubre lugar, al llenarse de impaciencia divisó a lo lejos a un anciano quien deambulaba por en medio de las tumbas, sin tener alternativa inmediata clamó a gran voz “señor, señor, ¿me acompaña a cruzar el cementerio?” el anciano sorprendido por la confianza de la joven accedió a su petición; mientras caminaban por en medio, ya del largo lugar, la joven le pregunta ¿disculpe señor, y a Usted no le causa miedo el caminar por en medio de tanto muerto? El anciano sonriendo le contestó “cuando estaba vivo sí­â€.
Que curioso el saber que los que dañan son los vivos, a diferencia de los muertos y por ello me declaro amigo de los muertos, mi amistad con ellos inició cuando leí­ la vida de un personaje bí­blico llamado Josué, con el cual mi amistad ha crecido últimamente aunque Josué murió hace unos dos mil quinientos años lo que he aprendido es a imitar su valentí­a y coraje, un joven muchacho temeroso de Dios quien desarrolló una gran amistad con otro conocido quien también murió con el pasar de los años, su nombre era Moisés, sí­ el libertador del Pueblo de Israel de las garras de la esclavitud que vivieron por más de cuatrocientos años en Egipto, de él aprendió mi amigo Josué todo lo que conoció referente a un liderazgo efectivo, aprendió de su tenacidad, de su pasado y debilidad; pero sobre todo aprendió de su amor y respeto para con Dios como de la comunión que ellos tení­an en la intimidad en medio del desierto por donde caminaban uno por medio de la nube y fuego y el otro a pie. Mi amistad con Josué me ha dejado mucho, una de las cosas que más disfruto es que a pesar de nuestra diferencia de edades no peleamos por discrepancias de criterios o apreciaciones personales, pues entendemos del libro que lleva su mismo nombre “Josué”, donde cita “Yo y mi casa serviremos a Jehová”. Decisión que hoy por hoy hemos seguido hasta que nos lleve el olvido y al pie de la letra hasta que Dios lo permita. “Amigo de los Muertos” pero vivos de Espí­ritu, pues en ellos encontramos respuestas que los vivos callamos y su mejor colaboración la encontraras a continuación, la Biblia dice: “El que anda con sabios, sabio será” Prov. 13:20; por ello hoy me declaro: soy amigo de los muertos aunque yo camine por hoy con los ojos bien abiertos.

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“A FALTA DE PAN, TORTILLA”

Es notoria la falta de liderazgo polí­tico que esta viviendo nuestro amado El Salvador, a un año y medio de las elecciones presidenciales ha sido necesario acudir a las alianzas partidarias como estrategias para pretender llegar a la silla presidencial en el 2009. El pueblo salvadoreño cansado de las falsas promesas, la impunidad, la desigualdad y la falta de oportunidades esta decidido a cambiar el rumbo del paí­s echando mano del voto y de todo lo que este a su alcance, esto incluye figuras populares y paramilitares, olvidando que lo que nuestro paí­s necesita es un liderazgo sólido, preparado y consolidado. Liderazgo según el diccionario de la lengua española, se define como: “la dirección, jefatura o conducción de un partido polí­tico, de un grupo social o de otra colectividad.”

A falta de pan, tortilla; los partidos polí­ticos están nominando candidatos famosos, pero no capaces; conocidos, pero no bruñidos; por sus actos u acciones personales, ya estamos pagando caro el haber tomado el populismo como base para una elección de tan grande envergadura, no erremos de nuevo. Liderazgo según el diccionario de Ciencias de la conducta, se define como: “las cualidades de personalidad y capacidad que favorecen la guí­a y el control de otros individuos”, quedando en evidencia que hoy por hoy no existe un candidato con dicho perfil en ninguno de los partidos en contienda, tomando como base la inestabilidad emocional que muestran en sus discursos vací­os de contenido lógico y llenos de resentimiento social, dando como producto el rencor, el odio, el orgullo y la soberbia partidista, cosas con las cuales no se puede gobernar democráticamente. El Salvador necesita del pan y hoy he descubierto donde encontrarlo, sus discursos motivaban a familias enteras, sus palabras sanaban corazones, sus manos sacaron adelante a la misma gente que viví­a en mesones, su voz calmaba tempestades, su mirada perturbaba hasta los principales (sacerdotes), su carisma impregnaba corazones y sus razonamientos cambiaban situaciones (problemas) ese “pan” que El Salvador necesita se llama “Jesús”. En Jn. 6:35, la Biblia Reina Valera (1969) dice: “Yo soy el pan de vida; el que a mí­ viene, nunca tendrá hambre”. Salvadoreño cuidado, no compares el pan con la tortilla, Jesús es el Pan de vida, votemos por él en el presente, para que sea él quien unja a nuestro próximo presidente, alguien que piense en la gente antes que en su propio vientre.

MUJERES COMO MARíA

Vivir en el Siglo XXI es una bendición, los avances de la ciencia son notorios, las comunicaciones han evolucionado a tal grado que hasta los niños poseen su teléfono móvil o celular, las compras del supermercado se realizan desde la comodidad de nuestros hogares o lugares de trabajo; pero esto ha complicado lo sencillo, el Amor.

La comodidad ha afectado negativamente nuestra parte más vulnerable, el corazón, llevándonos a buscar a nuestra alma gemela o complemento de una manera cibernética o moderna, ignorando las consecuencias atroces que esto traerá para generaciones futuras; pues sin buenos fundamentos toda construcción tiene altas posibilidades de colapsar a corto plazo, hablo de las relaciones familiares. Me aterra saber que en la Web puedo encontrar la mujer de mi vida, la madre de mis futuros hijos, mi compañera de vida; y se preguntará el por qué? por el simple hecho que yo buscarí­a a una mujer perfecta.

La pregunta es entonces ¿existen las mujeres perfectas? Bueno depende de su cosmovisión. Posiblemente cuando piensa en la mujer perfecta lo primero que viene a su mente es el fí­sico, los labios de Angeline Joly, la cintura de Thalia, las piernas de Ninel Conde, el bronceado de Niurca; pero la realidad que todas estas cosas son pasajeras; pero la fidelidad, la pureza, la honestidad como el buen nombre, permanecen para siempre. Todas estas caracterí­sticas las encontré, y no en la Web, sino en la Biblia, libro histórico para muchos y Palabra de Dios para otros. Pasando sus paginas me encontré con una mujer excepcional su nombre “Marí­a”, su personalidad inigualable, su fí­sico impecable, su vocación insuperable y su nombre inolvidable, el sueño de Dios hecho realidad; en estas páginas vemos que la mujer perfecta sí­ existe y podemos aprender de ella, la oración nos recuerda lo que a muchos alegra: Marí­a llena eres de Gracia, El Señor es contigo, bendita tu eres más que todas las mujeres. La Biblia expresa que mejor es el buen nombre que las muchas riquezas y es por ello que hoy les digo que si estás buscando complemento, novia o compañera, no la busques solamente con tus ojos fí­sicos, búscala con tus ojos espirituales y si en el camino necesitas una guí­a, utiliza la Biblia, La Palabra de Dios; pero si buscan un Standard aquí­ la tienes, Marí­a la madre de Jesús; abre bien los ojos, pero sobre todo abre tu corazón para que poniendo este fundamento encuentres el mejor complemento a Marí­a como ejemplo y a Jesús como tu Salvador.

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