Yo era feliz contigo vida mía, tu eras principio y fin de mi alegría, yo te creía fiel como la luna que acude a protegernos cada día. Tu eras mi perro fiel, yo tu guía, hasta que desperté de mi locura y pude comprender que me mentías, todo se derrumbó dentro de mí, dentro de mí, hasta mi aliento ya me sabe a hiel, mira mi cuerpo ya como se quiebra mira mis lágrimas como no cesan por ti, todo se derrumbó dentro de mí, dentro de mí, de humo fue tu amor y de papel, mira mis sueños como se queman mira mis lagrimas como no cesan por ti………
Parece mentira lo que la Biblia nos dice, que cuando nos casamos somos una sola carne, esto no es un mito es una realidad que aquellos que unimos nuestras vidas unimos nuestras almas para siempre, recuerdo el día que concebimos a mi hijo mayor que ya tiene trece años de edad; un dia platicábamos con mi esposa y le pregunté ¿amor recordás cuándo quedaste embarazada de nuestro primer hijo?
Ella inmediatamente quiso contestar, yo le dije espera fue el sábado a las 4:45 de la tarde y ella contesto que sí, esa fue la fecha y la hora.
Esto se logra con el paso de los años, esto es el resultado de compartir no solo una cama sino una visión en común, un objetivo específico la búsqueda de la felicidad en todos sus aspectos; es bello estar enamorado, es bello no importar si el cabello de ella está mal peinado. Es bello el pasar horas platicando y en ocasiones a gente criticando en el mismo colchón que niños estamos fabricando, esto es un regalo Divino que no sabemos cómo llegó o de dónde este vino; pero la realidad es que bendice a todo aquel que lo experimenta.
El problema de esta situación de enamoramiento y de esto no les miento, es el hecho de fallar a nuestros compromisos estando supuestos a ser sumisos y fieles no como aquellos que visitan regularmente moteles; todo cambia todo se degenera, todo termina como en una común cantina; borrachos de placer no nos volteamos ni a ver, satisfechos nuestros cuerpos y saciados de placer será hasta el próximo semestre cuando nos volvamos a ver. Perdemos la visión de lo agradable y pensamos en lo despreciable.
Todo se derrumbó, desde el momento en que decidimos dividirnos o compartirnos cada quien con sus amigos buscando distintos destinos; experimentando con lo prohibido vamos poco a poco perdiendo el sentido, el mal está siendo absorbido por medio de nuestros cuatro sentidos. No esperes a que esto te suceda a ti, no dividas lo que puede preservar nuestras vidas que es la Familia; hagamos juntos el esfuerzo por preservar nuestras buenas costumbres, que lo ajeno no nos vislumbre, disfrutemos lo que tenemos en casa, aunque nos bombardeen con un avión caza, atrévete a cambiar tu destino siguiendo en el mismo camino, la Familia.