El español que hablamos en el computador

Tal y como aseguran los expertos estudiosos de la evolución de las lenguas en cada cultura y país, el acervo de palabras, expresiones y formas de construcción en cada idioma va sufriendo transformaciones a lo largo del tiempo. Esto se debe, entre otras cosas, a la influencia global y a los nuevos elementos que pasan a integrar la cultura y la vida diaria.

Son pocas las disciplinas profesionales y tecnológicas que han experimentado una transformación y avance en tan corto tiempo como las vinculadas a la tecnología de información. Esto va desde la miniaturización de los circuitos integrados y microprocesadores, con sus millones de transistores, hasta los poderosos administradores de bases de datos, los lenguajes de desarrollo de aplicaciones y sistemas, y la gran velocidad a la que viajan los datos por todo el planeta.

Con el surgimiento de tantos nuevos dispositivos y la creación de tantos nuevos conceptos, también cobran existencia nuevos nombres, términos y expresiones. Estas nuevas palabras, habiendo sido originadas en otros idiomas, mayoritariamente el inglés, deben ser rápidamente incorporadas en nuestra lengua materna al mismo tiempo en que van siendo introducidos en nuestra vida, sin mucha oportunidad para ser traducidas o reemplazadas por términos creados para ese fin.

Por la misma velocidad, la personalidad cultural en cada país y región y la proximidad geográfica, es posible incluso que los nuevos términos sean asimilados en forma distinta de una nación a otra, aunque hablemos el mismo idioma.

Así, parafraseando al insigne Pedro Geoffroy Rivas, y solicitando la benevolencia de los lingüistas, es posible identificar algunos elementos del español que hablamos en el computador, y particularmente en El Salvador.

Difícil de traducir

Hay expresiones que provienen de frases para las que es difícil encontrar un equivalente en nuestro idioma. Así, es necesario “butear” la computadora (del término “boot”, bota) para inicializar la máquina. Cuando inexplicablemente deja de trabajar, hay que “resetear” el computador, y/o “setear” la configuración del “bios” en forma correcta. También puede suceder que se nos olvide el “paswuor”, que lo “tecleemos” mal, o que la solución sea tan elemental como “pusharle” el “suitch on-of” para que encienda.

Las bases de datos pueden no estar correctamente “indexadas”, por lo cual tal vez sea necesario recuperar el “bac-ap” más reciente o “bacapear” en ese momento la información. En alguna ocasión, el disco duro se puede “envirular”, y quizá haya que “formatearlo” por completo, con la posibilidad de perder información importante.

Al ofrecer una presentación sobre un tema particular, podemos usar una “laptop” o una “notbuk”, en conjunto con un “data show” o un “cañón” que nos permita proyectar nuestros “eslaids” con alta resolución, usando la mayor cantidad de “pixeles” que se puedan. Si no se entregan copias “printeadas”, algunos de los asistentes seguramente tomarán apuntes en sus “palms”, en los nuevos “blackberries” o en los “simples” celulares.

Los archivos que contienen los documentos, las presentaciones, las fotos y los videos, por ejemplo, pueden ser transportados en una “memoria USB”, “memoria flash” o simplemente “USB”, o pueden ser “quemados” en un “cidi”, “subidos” a algún “disco virtual” en Internet, o anexados a un “emilio”, “i-meil”, o correo electrónico (término usado frecuentemente en lugar de “mensaje”).

Españolización, traducción o adaptación

En otros casos, las palabras y frases se traducen o se adaptan. Así, es deseable contar con un servidor que sea “tolerante a fallas”, que tenga “fuente de poder” “redundante”, y que permita el “cambio en caliente” de sus dispositivos. También es importante al momento de adquirir un computador conocer si aun cuenta con “disquetera”, si trae o no “cartuchera” para hacer copias, conexión de “waifai” y cuál es la velocidad de su “cidirrom” o si su “divirrom” permite quemar los “dividís”.

Los dispositivos accesorios son también de relevancia, tales como el “ratón”, el “printer”, el “escáner” o “digitalizador”, el “ploter” y las tarjetas de sonido y de red. En un nivel más interno, también cuentan los puertos “usb”, “seriales”, “paralelos”, así como las ranuras vacías que permitan conectar dispositivos externos.

Con frecuencia hacemos verbos las palabras en otro idioma (fundamentalmente inglés) que sentimos más próximas a lo que queremos expresar. Por ejemplo, “tagueamos” los sitios web o las partes de un documento, “pinguiamos” una dirección en Internet para probar si responde, o “daunlodeamos” contenidos interesantes de la web a nuestra computadora.

El Web o la gallina: ¿qué fue primero?

Internet es otra fuente de nuevos términos. Así nos podemos “imeilear” algunos mensajes, “efetepear” los archivos y navegar en el ciberespacio. Los que administran sistemas deben tener cuidado con los “hackers” y los “crackers” que pretenden, a veces inescrupulosamente, “hackear” un sistema, saltando los “faierwols” o “paredes de fuego” y los “proxis” que hemos colocado.

Las páginas “web” son visitadas gracias a los “brausers” y a la velocidad de la conexión que nuestro “ISP” nos puede ofrecer. También podemos “chatear” con algunos amigos o buscarlos por medio de “Skype”, “Messenger”, “Facebook”, “Hi5”, “Wayn” y las demás redes sociales a través de la gran Red.

También podemos hacer “daunlod” de lo archivos, fotos y programas, o podemos “subir” nuestros propios “videos” a “Youtube” y otros depósitos de información en el mundo. Podemos deambular por el “blogcindario” o la “blogósfera”, y si no encontramos algo, podemos intentar “guglearlo” (a propósito, ésta es una de las acciones más frecuentemente realizada en Internet todos los días, en todo el planeta).

El castellano también aporta

Siendo uno de los idiomas más ricos, el castellano no podía quedarse atrás, y algunas palabras empleadas en la jerga han sido tomadas del español aceptado, en algunos casos aportándoles nuevas connotaciones. En España se utilizan “ordenadores” para trabajar con los “ficheros” que contienen la información.

En todo caso, en cualquier país, siempre puede ser necesario “abortar” un programa o una “sesión” ante un eventual problema, sobre todo si no se ha hecho una buena “depuración” de los programas “fuente” antes de “compilarlos” para crear los programas “objeto”, “ejecutables” o “binarios”.

Una red de computadores está formada por un servidor y varias estaciones, así como cables coaxiales o trenzados, o fibra óptica. Como parte de esa red pueden haber repetidores, puentes, enrutadores y hasta cajeros automáticos y puntos de venta. La conexión puede ser “cableada” o “inalámbrica”.

Si alguien se lo propusiera, podría construir una wikipedia (¡hablando de nuevos términos!) con todas las palabras, verbos y definiciones que a diario utilizamos y aprendemos en esta nueva época.

Lo más importante es que nosotros, los humanos que utilizamos estos dispositivos de tecnología reciente, lo hagamos en forma eficiente, tanto en forma aislada como en red, y que eso nos haga permanecer “enredados”, pero no tan enredados.

4 comentarios sobre “El español que hablamos en el computador”

  1. Muy bien dicho Lito. Este articulo no solamente ameno sino interesante tambien.

    Es increible deternerse a pensar como nos adaptamos al rapido avance tecnologico en esta area que no nos damos cuenta en el lexico que utilisamos sin pensar a veces si lo que decimos o deletreamos bien es de forma correcta, o si ya existe alguna traduccion al espanol.

    Esto es ciertamente mas notorio para aquellos que residimos fuera del pais y no estamos al tanto de las modalidades (anglicismos) adoptados en el momento.

    Ahora solo me resta enviar el enlace de este articulo blog a mis cheros.

  2. Me parece interesante la forma en la que analizas los cambios del idioma bajo las influencias tecnol`ogicas. Es claro que la tecnolog`ia se mueve m`as r`apido que el idioma porque no da tiempo para crear cada una de las nuevas palabras, sino que las recibe, las adopta y busca en algunos casos su correspondiente equivalente. Los ejemplos que propones me parecen van m`as en la linea del «spanglish», la nueva versi`on inglesa del espanol en los Estados Unidos. El «spanglish» que crea o incorpora, en la mayor`ia de los casos, nuevos terminos tomados directamente del ingl`es y que los hace parte de lenguaje com`un. La inquietud que presentas es clara al ver como el idioma sufre las transformaciones de la `epoca.

  3. Saludos muy afectivos lito. Interesante articulo. Como nos hace falta hacer un alto en nuestras agitadas rutinas para aprender o aportar algo a quien se interese.

  4. Gracias Lito por tu articulo tan certero.
    Si es una lastima que muchos de nosotros ni siquiera tomamos «Tecnicas de Redaccion» en la U.
    Asi que no sabemos ni siquiera redactar en «nuestro» idioma natal, mucho menos traducir del/al segundo idioma (Ingles?).
    El otro problema grande es que es dificil (bueno, lleva tiempo) agregar acentos u otros caracteres especiales usando «tecleados» gringos.

    Bueno. espero que entiendan este «Salvadorean Spanglish» y que nos sigamos comunicando.

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