Lo bueno, lo malo y lo feo de Internet en la crisis

No hay duda de que, en medio de la pandemia mundial, el uso de Internet se ha visto ampliado de varias formas y por muchas razones. La cuarentena que invita a no salir de casa, ha motivado a muchos a trabajar, estudiar y comunicarse desde los dispositivos conectados a Internet. Los que tenemos acceso a la gran red, la aprovechamos y agradecemos su existencia y nivel de desarrollo.

Sin embargo, como en toda actividad humana, y más a nivel mundial, en la misma plataforma mundial existen y ocurren una serie de actividades, propuestas y situaciones, algunas de las cuales son buenas, otras malas y algunas más feas.

Lo bueno

Afortunadamente, ésta puede ser la lista más larga, aunque no incluyamos todo lo bueno que Internet nos provee en estos tiempos de circulación física limitada.

  • Sitios web dedicados: La mayoría de personas buscan información sobre la situación actual. La que se encuentra en las redes es volátil y no siempre fidedigna. Los sitios web dedicados proveen esta posibilidad.
  • Clases en línea: Al suspender la asistencia a escuelas y universidades, las clases remotas están ayudando a minimizar el retraso.
  • Reuniones: Ya sean de trabajo, planeación, diversión o familiares, las reuniones virtuales permiten mantener la continuidad.
  • Trabajo desde casa: Aunque no todo es susceptible, hay tareas que se pueden adelantar desde la casa.
  • Comunicación con seres queridos: Una de las más valiosas, aunque puedan vivir en la misma ciudad, o muy cerca, Internet ha facilitado esta vinculación afectiva.

Lo malo

Con malas intenciones, algunos seres humanos hacen uso de la tecnología para engañar, interrumpir, molestar y aprovecharse de los demás.

  • Zoom bombing: Ataques por intrusos no invitados en medio de reuniones virtuales, con material ofensivo y banal, usando la plataforma Zoom, aunque puede aplicarse a todas las demás.
  • Ventas de productos falsos: Algunos individuos tratan de engañar y vender en línea productos fraudulentos, como medicinas falsas.
  • Publicidad engañosa: Aprovechando que no todo puede ser comprobado, en algunos casos se miente sobre las características de algunas ofertas.
  • Dificultades en saturación de conectividad: Dependiendo de la región, el país y el nivel de desarrollo y madurez de los servicios, el aumento en el uso puede deteriorar la señal.
  • No todas las personas tienen acceso a Internet: La brecha digital que ya existía, puede expandirse a partir de esta crisis.
  • Los criminales están sacando provecho de la crisis: De diversas formas, las malas personas sin escrúpulos hacen uso de las herramientas tecnológicas para enriquecerse a costa de los demás.

Lo feo

También de connotación negativa, hay situaciones que pueden decepcionar por su mera existencia, agravando una crisis que de por sí es mala.

  • Abuso de nombres de dominio: Se han detectado más de 68 mil nombres de dominio en los que no todos están utilizando la referencia del virus para actividades lícitas o positivas.
  • Noticias falsas: Por exageraciones, especulaciones, o la mala intención de causar pánico y sorprender a los ingenuos, la propagación veloz de noticias falsas es un mal en la red.
  • Zozobra y baja de moral: Dependiendo de la fortaleza espiritual de cada uno, la situación puede ser agravada para algunas personas por medio de comunicaciones pesimistas.
  • Provecho particular: El incremento de precios en artículos, la provisión de productos escasos, y otras formas de actividad, pueden ser solamente para provecho individual.
  • Reducción de calidad en el servicio de varios proveedores de contenido en Internet: Previendo el lógico incremento en la demanda, algunos servicios de contenido han acordado bajar su nivel de calidad intencionalmente.

Experiencias en la interacción en línea al trabajar desde casa

A estas alturas, y en buena medida obligados por las circunstancias mundiales y las disposiciones en muchos países, un buen número de personas han debido quedarse en casa, e intentar realizar al menos algunas de las actividades productivas desde ese lugar. Aunque no siempre se menciona explícitamente, esta nueva forma de laborar supone una buena dosis de tecnología.

Las actividades que pueden ser suplidas de esta forma son las intelectuales, y esto siempre y cuando se cuente con las herramientas adecuadas, principalmente una terminal para conectarse, que puede ser un celular, tableta, laptop o desktop, y por supuesto, una buena conexión a Internet, lo que significa que sea estable, con la apropiada velocidad, retardo aceptable, y eficiente, con la menor cantidad de pérdida de paquetes.

Aunque ni todas las actividades laborales pueden ser suplidas ni todos los individuos pueden acceder a estos servicios, es seguro que cada vez más estados, empresas, instituciones y personas se preocuparán por facilitar esta posibilidad en la mayoría de sus ciudadanos.

Algunas novedades para muchos

Para muchas personas, trabajar desde casa usando la tecnología para comunicarse, enviar documentos, trabajar hojas multicolumnares y escritos en forma colaborativa, sostener reuniones de trabajo en línea, relacionarse con clientes, tomar pedidos, realizar pagos y abonos, y entrar y usar las plataformas de educación o colaboración en línea, está siendo una novedad.

Esto ha resultado en un conjunto de anécdotas y situaciones donde, usando las diversas plataformas de comunicación, formación, colaboración y educación en línea, algunos más experimentados tratan de orientar a los recién llegados a estas metodologías, de tal forma que se logren los resultados buscados al trabajar en forma remota, o desde la casa.

Algunas de estas experiencias, sucedidas o por suceder en cualquier lugar del planeta durante una interacción en línea son las siguientes:

  • Los bebés e hijos pequeños irrumpen en el espacio donde papá o mamá están reunidos en línea con sus colegas o clientes, solicitando comida o ir al baño.
  • Las mascotas no distinguen que su amo se ha quedado en casa para trabajar, no para jugar o ponerles atención: perros ladrando, pericos gritando improperios, gatos con ataque de asma.
  • La pareja hace algún comentario o, peor aún, alguna aparición en el vídeo de la conferencia remota, realizando algún acto privado y propio de la intimidad del hogar.
  • Los participantes encienden, o dejan encendido, el vídeo o el audio de la comunicación, en momentos en que no estaba supuesto a ser escuchada o vista la actividad, la decoración o el atuendo con el que se está en la comodidad de la residencia.
  • Cuando se usa el vídeo, es fácil olvidar que, aunque se encuentra en casa, más personas lo están observando todo el tiempo, y realizar actividades casi en forma inconsciente, como rascarse, hurgarse, burlarse, tomar una llamada, distraerse, y más.
  • El fondo que se muestra al resto de los participantes puede ser para nosotros habitual, y quizá refleja nuestro gusto e (in)capacidad para mantener un lugar ordenado, pero no necesariamente será bien visto o compartido por la audiencia.
  • Aplicando la cortesía de mantener enmudecido el micrófono mientras no se participa, a veces se olvida o se tiene inconvenientes para encender el micrófono, con el resultado de dictar un pequeño discurso a la audiencia, sin que nadie haya escuchado una palabra por minutos.

Además de las mencionadas, muchas más experiencias y anécdotas, cómicas o vergonzosas, pueden pasar en estos tiempos en que la comunicación en línea ha cobrado una relevancia mayor a la que ya tenía. Todo es parte del aprendizaje en línea.

Tecnología al rescate: Primer foro mundial de ICANN realizado en línea

La pandemia que fue decretada por la Organización Mundial de la Salud debido a la propagación mundial del Coronavirus, causante del COVID-19, ha provocado, y lo seguirá haciendo, muchos efectos en otras áreas de la vida de la humanidad, además de, obviamente, la salud.

Adicionalmente a las consecuencias en el flujo de turismo en muchos lugares, la reducción en la producción por falta de materias primas provenientes de países con veda de viaje, las disposiciones nacionales de cuarentena, el cierre temporal de centros educativos y recreativos, la saturación y falta de locales en los que ubicar a las personas que deben guardar aislamiento, y otras medidas, también se han suspendido, reprogramado o transformado muchos eventos públicos en el mundo.

En algunos casos, esa transformación ha consistido en realizar estas reuniones de trabajo o sesiones de presentación, utilizando alguna de las varias plataformas que existen para comunicarse y realizar reuniones, con más o menos personas, por medio de la tecnología de Internet.

ICANN 67, una primera experiencia en línea

Una de estas experiencias, considerado ahora un experimento exitoso, que fuera realizado en forma remota, fue el primer evento anual de ICANN, la Corporación Internet para Nombres y Números Asignados, de los tres que se esperan realizar en el 2020. La reunión ICANN 67 debía ser realizada en Cancún, México, del 7 al 12 de marzo, y como es usual, se esperaba una asistencia de 2,500 a 3,000 personas de todo el mundo.

El 19 de febrero, unas pocas semanas antes del evento, el directorio de ICANN tomó la difícil decisión de mover dicha reunión a un formato virtual, o mejor dicho, en línea. Las consideraciones para llegar a esa resolución fueron muchas, y desde varias perspectivas, valorando los pros y contras, los costos financieros, reputacionales y otros, de una u otra opción.

Normalmente, el encuentro presencial contiene unas 300 sesiones o reuniones entre los distintos grupos de trabajo, grupos de interés y otros subgrupos. Adicionalmente, durante el fin de semana anterior, el directorio se reúne para discutir algunos temas y preparar su participación en las reuniones que ocurrirán.

Cortesía de ICANN

En el formato virtual, vICANN67, se utilizó la plataforma Zoom, con mucho éxito. Los encargados de la logística y preparación de las sesiones y reuniones, así como los técnicos, replantearon las jornadas, seleccionado las más urgentes, en base a los insumos provistos por la misma comunidad que se iba a reunir. La cantidad de sesiones fue mucho menor, pero el trabajo logró avanzar, y en algunas de las reuniones se contó con más de 500 personas, desde su respectivo huso horario.

Ante la emergencia que se vive a nivel mundial, la opción de realizar las reuniones de trabajo en línea, aprovechando las posibilidades tecnológicas y la conectividad de Internet, es sin duda una clara y positiva posibilidad, para cualquier empresa o institución, productiva, educativa o social, de cualquier sector y área de trabajo, que contribuirá a reducir las posibles pérdidas económicas, o retrasos en las decisiones. Hay todas las posibilidades de éxito, como el de ICANN 67.

Nombres de dominio SV con vocales tildadas y “ñ”

Las letras con tilde y la letra ñ son los caracteres del alfabeto, de la gramática y ortografía de la lengua castellana, que son intrínsecas a nuestra herencia hispana y una parte esencial de nuestra identidad cultural. Dado que no aparecen en el alfabeto latino utilizado en el idioma inglés, al principio de la era digital no contaban con representación, y los teclados no los incluían.

Algunos conjuntos de caracteres en diversos idiomas que se hablan en el planeta, como el árabe, chino, ruso, japonés, y otros, han tenido esa misma ausencia, a pesar de que hace ya años que se diseñaron los códigos binarios para representarlos.

Esa misma tendencia han seguido los nombres de dominio en Internet. Los esfuerzos por incluir otros conjuntos de caracteres en las direcciones de sitios web y en las direcciones de correo electrónico se encuentran incluidos en las iniciativas IDN (Nombres de Dominio Internacionalizados, por sus siglas en inglés) y UA (Aceptación Universal, por sus siglas en inglés).

En El Salvador

En la actualidad, la mayoría de navegadores reconocen los caracteres de otros conjuntos de símbolos en otros idiomas, incluyendo las vocales tildadas y la letra ñ. Aun se trabaja en que los administradores de correo electrónico acepten y descifren correctamente los nombres de dominio que van después de la arroba en las direcciones de correo electrónico.

Teniendo esto en consideración, SVNet, como el administrador de los dominios SV para El Salvador, está abriendo la posibilidad de registrar nombres de dominio que hagan uso de vocales con tilde y/o con la letra ñ como parte del mismo.

La consideración principal es que se debe comprender que estos dominios IDN sólo servirán, por ahora, para definir direcciones de sitios web, pero no para direcciones de correos electrónicos. La otra salvedad es que se dará prioridad, por un período, a quienes tienen ya registrado un nombre terminado en SV, y que podría utilizar vocales con tilde o ñ, antes que al público en general.

Si, por ejemplo, alguien tiene registrado el nombre de dominio “salvadorenos.com.sv” o “arboles.org.sv”, esta persona tendrá la primera opción para registrar “salvadoreños.com.sv” o “árboles.org.sv”, respectivamente. Si esta entidad, persona o empresa, no lo desea, lo puede registrar cualquiera otra.

Los precios y condiciones se mantienen similares, y se puede solicitar el nombre escrito en castellano (salvadoreño.com.sv o árboles.org.sv), o en su formato en punycode, que es el código utilizado para esta conversión. En este caso, el nombre sería “xn--salvadoreos-9db.com.sv” o “xn--rboles-ota.org.sv”, respectivamente.

Hardware diseñado y fabricado en El Salvador ¿Es posible?

En países como el nuestro, con los problemas que nos aquejan, las limitantes históricas y actuales para que una mayoría de ciudadanos puedan acceder a educación, para que haya inversiones, sobre todo en áreas no tradicionales de la economía, y para que las políticas públicas logren romper los obstáculos estructurales, es difícil concebir que podamos participar en la industria mundial de alto valor agregado.

El diseño y fabricación de hardware basado en elementos electrónicos y digitales, para realizar funciones propias de un ambiente digitalizado, es un sector de la industria que puede ser intimidante, por varias razones, para nuestros ingenieros, productores, empresarios e inversionistas locales.

Parte de la filosofía de trabajo de Compucentro

Por esas razones, es reconfortante conocer experiencias salvadoreñas que tienen el potencial, la capacidad, el talento, la energía, los deseos y, sobre todo, la voluntad, de sobresalir en el mundo, enfocándose en el desarrollo de hardware digital para distintas aplicaciones.

Un kiosko automatizado de pago… y más

Una empresa salvadoreña llamada Compucentro, fundada en 1995, y con el empuje de sus líderes, Edgar Borja hijo y padre, están diseñando y construyendo, desde hace unos cuantos años, productos de hardware y software que responden a necesidades en el ambiente salvadoreño y mundial, facilitando algunas tareas a los usuarios de tales dispositivos.

Figura cortesía de Compucentro

Uno de estos dispositivos, quizá el más impresionante por su funcionalidad, apariencia, versatilidad, utilidad y nivel de sofisticación, por el hecho de utilizar dinero en sus transacciones, es un kiosko automatizado de pago, que puede ser, para Compucentro, fácilmente adaptable a otras funciones.

Figura cortesía de Compucentro

Por ejemplo, utilizando algunos módulos diseñados para este kiosko, el equipo de diseño y construcción ha diseñado, y tienen en fase de prototipo, un receptor automatizado de las cuotas de pago por seguridad en colonias, comunidades y condominios, extendiendo esta posibilidad a 24 x 7, comparado con la forma actual y más difundida de realizar este cobro, por medio de una persona.

Figura cortesía de Compucentro

Igualmente, han diseñado y construido un casillero electrónico, con el que buscan facilitar la entrega de productos entre emprendedores comerciantes y productores pequeños, y sus clientes, al realizar entregas en puntos intermedios, usando los casilleros, con clave para que el comprador recoja su producto.

Algunos diseños, como el de una pequeña consola de videojuegos, estilo Game Boy, que se puede construir por menos de $5, ha sido colocado por Edgar para ser compartido en su espacio www.github.com/edgarborja, con el fin de que cualquier institución educativa, o joven interesado lo pueda realizar. Ver artículo aquí.

La imaginación, la creatividad y la innovación parecen ser los motores de esta empresa y de sus emprendedores. Compucentro es la confirmación práctica de que buenos productos de calidad pueden ser diseñados, concebidos y construidos en nuestro país por medio de la colaboración multidisciplinaria, y un claro sentido de realidad, oportunidad y visión, así como una filosofía que le da vuelta a las aparentes desventajas de nuestro país, hacia un verdadero potencial de generación de riqueza y reputación.