Iniciativas, emprendimientos, eventos y aplicaciones: Oportunidades post-cuarentena

Al principio de la cuarentena, tomados por sorpresa, la mayoría nos quedamos en casa, bajo un encierro estricto, en un estado que mezclaba el temor, el desconocimiento y la incertidumbre, prácticamente sin hacer nada productivo, confiando en que pronto pasaría esta condición.

Paulatinamente, las actividades que podían serlo, fueron trasladadas al ámbito digital: trabajo en casa, con comunicación con los demás colegas y la empresa; reuniones en línea con socios, empleados, clientes y equipos internos de trabajo; clases escolares y universitarias, charlas en línea y otras conferencias.

Más adelante, varios emprendedores, gerentes, juntas directivas y demás líderes empresariales, dándose cuenta que sus empresas privadas, organizaciones de la sociedad civil, universidades, colegios, instituciones públicas, deben pensar en el futuro, además del presente, han comenzado a repensarse y en algunos casos, a rediseñarse.

La creatividad después de la reflexión

En algunos casos ha sido evidente, pues hemos podido aprovechar los nuevos ofrecimientos de algunas empresas, con los servicios a domicilio siendo los más populares y demandados. En otros casos, las ideas y redefiniciones de servicios o productos, están siendo aun concebidas, y serán pronto lanzadas a un mercado que está pidiendo nuevos servicios y productos.

Así, hemos comenzado a ver en el mercado, de forma creciente:

  • Ofrecimientos de plazas de venta, centros comerciales virtuales, “marketplaces”
  • Servicios de entrega a domicilio, servicios de encomiendas, transporte de documentos
  • Traslado de personas
  • Ventas en línea de productos para ser recogidos posteriormente o enviados vía un servicio de entrega
  • Propuestas de servicios personales, como conciertos musicales privados, consultas psicológicas y clases de música, artes plásticos, artes marciales
  • Espacios para reflexión en grupo
  • Ofertas de comida casera, ventas de frutas y verduras, sobre todo en la zona aledaña
  • Atención de servicios de salón, peluquería y cuidado personal, dentro de las comunidades
  • Conferencias y eventos de parte de universidades y entidades intelectuales, buscando mantener presencia en la mente de los usuarios

Por supuesto, la variedad de la oferta de servicios y productos seguirá creciendo. No importa que ya haya más actores y empresas ofreciendo lo mismo. El mercado ya no es solamente el país, por un lado, y por otro, en algunos casos, la oferta local, con algunas características propias, es más atractiva para los locales.

Para los jóvenes que han aprovechado el tiempo para desarrollar habilidades digitales, el cambio de visión que la cuarentena ha provocado en varios empresarios de distintos sectores, haciéndoles comprender la importancia de la fortaleza digital que las empresas deben tener, está abriendo varias puertas de trabajo que son una oportunidad para mostrar la capacidad estratégica y táctica de cada uno.

Está en cada una de las personas que tienen competencias digitales, innatas (por el ambiente que les ha tocado vivir) y adquiridas, por medio de cursos, clases y aprendizaje propio, aprovechar esta situación, presentarse con propuestas novedosas y cumplir con lo que se ofrece.

Desempolvando los equipos, licencias y la estrategia digital

Dependiendo de la definición de cada país, poco a poco los empresarios, trabajadores, emprendedores, gobiernos, universidades y todas las organizaciones que forman el aparato productivo de una nación, irán retornando a sus negocios y oficinas, y abriendo sus puertas, con prudencia, después de varios días de confinamiento y de trabajo, o no, desde casa.

Para algunos, significará volver a su lugar de trabajo después de un período considerable de ausencia, y seguramente el regreso no será igual para todos. Es posible que solamente una parte de los colaboradores vuelvan en una primera instancia, debido a la estrategia propia de cada unidad productiva.

El estado anímico también puede ser distinto, según la personalidad, la residencia, la experiencia y las condiciones del regreso de cada persona. Quizá algunos colaboradores y empleados no puedan volver de inmediato, debido al transporte disponible, a sus condiciones físicas de vulnerabilidad, o sus condiciones psicológicas de adaptación a nuevas formas de convivencia.

También la tecnología debe retornar

Si bien los bits y bytes no han dejado de circular en las redes que conforman Internet, sino más bien, se han multiplicado por varios medios, tratando de compensar y facilitar la continuación de labores productivas y de aprendizaje en forma digital y en línea, los equipos que están en la oficina y lugares de trabajo han podido experimentar un receso en su operación.

Además de desempolvarlos y limpiarlos, literalmente, de los efectos del paso del tiempo en abandono, habrá que encenderlos, correr algunos diagnósticos o rutinas de ejercitación, dependiendo de los equipos y la tecnología. Quizá en algunos casos habrá que actualizar licencias o versiones del sistema operativo y otras aplicaciones, antes de volver a utilizarlos efectivamente.

Es probable que los equipos directamente vinculados con la conectividad a Internet hayan permanecido encendidos, y dependientes del suministro de energía durante el período de ausencia de seres humanos. Algunos servidores, conmutadores, enrutadores, equipos de protección y seguridad deben haber quedado encendidos, deliberadamente, para que pudieran seguir prestando servicios a los trabajadores y clientes desde casa.

Plantas telefónicas, teléfonos y equipos de fax, donde aún se utilicen, así como fotocopiadoras y equipos multifuncionales también deberán ser encendidos y puestos a prueba y listos para ser utilizados de nuevo. Quizá en algunos casos también habrá que reparar desperfectos físicos, inundaciones, y otro tipo de irregularidades causadas por el tiempo y la falta de uso.

De cualquier forma, habrá que seguir observando los protocolos y las medidas preventivas que buscan evitar más contagios, al mismo tiempo que la reapertura busca recuperar paulatinamente las actividades económicas y productivas. En la mayoría de lugares incluso habrá que invertir en modificaciones físicas y adquisición de dispositivos como los termómetros y dispensadores de alcohol gel, así como distanciar adecuadamente las sillas y demás muebles que promuevan la distancia entre personas.

Esta combinación entre productividad, trabajo bajo una nueva normalidad, distanciamiento y medidas preventivas, cuidado mutuo y atención a las necesidades particulares de cada funcionario, colaborador, empleado y cliente o usuario, permitirá que recuperemos la mayor parte de nuestras actividades regulares productivas. Algo muy importante será la definición de la transformación digital que cada empresa, organización e institución decidirá adoptar.

Mitos y realidades de Internet y Covid 19

Recientemente, y a raíz de algunos temores, comentarios, e incluso decisiones por parte de autoridades nacionales de algunos países, Internet Society preparó y distribuyó entre sus capítulos una breve guía de 10 mitos y realidades sobre Internet en los tiempos de Covid 19. Por considerarla de utilidad se reproduce en este espacio.

Mitos y realidades

Mito 1: Internet está congestionado

Realidad: No existe congestión. Se ven aumentos de tráfico en las redes de última milla, en los IXP, en los enlaces internacionales, en las CDN, etc. Poder ver que el tráfico aumenta es la prueba de falta de congestión. Cuando el gráfico se ve «aplanado» en un nivel máximo es que hubo congestión.

Mito 2: El aumento del tráfico en Internet está afectando a los IXP

Realidad: El tráfico en los IXP del mundo aumentó por la pandemia y puede aumentar más sin afectar el servicio de Internet.

Mito 3: El aumento del tráfico en Internet está afectando a los proveedores en la última milla

Realidad: Las redes de acceso en fibra óptica y ADSL han podido responder sin problemas a los cambios de hábito en la población. Gran parte del aumento se da en horarios que normalmente eran de oficina, y en los cuales existía capacidad ociosa.

Mito 4: El aumento del tráfico en Internet está afectando a los proveedores a nivel del backbone

Realidad: Ningún proveedor ha reportado problemas en el backbone causados por el incremento de tráfico.

Mito 5: El servicio de Internet falla porque los empleados de los ISPs no pueden solucionar  problemas por la cuarentena impuesta

Realidad: No se registran problemas de servicio masivamente o diferentes a los normales, y los problemas que surgen se están resolviendo normalmente. En algunas redes se registran menos cantidad de problemas por la falta de actividad (menos cortes y mantenimientos). Puede haber dificultades para acceder a los hogares en los casos de reclamos de última milla.

Mito 6: Es mejor utilizar líneas fijas para llamada de voz

Realidad: La telefonía tradicional se planificaba para soportar una determinada cantidad de llamadas según una distribución estadística (Erlang) que permitía un uso normal, pero no soportaba picos de consumo (muchos recordamos que era imposible comunicarse en navidad o en situaciones de catástrofe). La voz sobre IP escala mucho mejor que las líneas fijas.

Mito 7: Es mejor utilizar SMS en vez de WhatsApp para mensajería instantánea

Realidad: El servicio SMS generalmente tiene costo para el usuario y utiliza recursos de la red móvil que pueden sufrir congestión. Es recomendable que al estar en sus casas utilicen los servicios de banda ancha en lo posible minimizando el uso de la red móvil.

Mito 8: Las limitaciones en la calidad de video que impusieron a Netflix y otros proveedores de video “on demand” ayudó a los proveedores

Realidad: La disminución de calidad no tiene impacto en el tráfico de los posibles cuellos de botella de los grandes proveedores (enlaces Internacionales, interconexiones con otros proveedores, IXP, etc.) No verán ninguna disminución en su conexión con el resto de Internet. Los cambios en la calidad del video si pueden ayudar en redes de acceso que presentaban altos niveles de ocupación (cercano a la congestión) o tecnologías que están limitadas en capacidad (como las redes de servicios móviles).

Mito 9: Los servicios  de «streaming  de audio y video “on demand» (Netflix, Amazon Prime, Youtube, Spotify, Deezer, etc.) tienen el mismo impacto en las redes que los servicios de comunicación de audio y video en tiempo real (videoconferencias, VoIP, live streaming, etc.).

Realidad: Los Servicios de streaming “on demand” generan un impacto distinto que servicios de comunicación en tiempo real.

Mito 10: Los proveedores de servicio de Internet pueden absorber los costos y no cobrar el servicio durante la pandemia 

Realidad: Muchos de los proveedores de Internet son pequeñas y medianas empresas que apenas pueden subsistir y no tienen ahorros ni financiamiento que les permita funcionar sin ingresos