STEM: Otro acrónimo que abre oportunidades

Aunque son disciplinas muy antiguas dentro de la clasificación y desarrollo del conocimiento de la humanidad, más recientemente se les ha concedido una atención especial dentro del ámbito educativo, en forma colectiva: la integración de la Ciencia, la Tecnología, la Ingeniería y la Matemática en el sistema educativo formal, conocida como STEM por sus siglas en inglés, trae retos y oportunidades para países en desarrollo. Algunos le llaman en español CTIM.

Somos conscientes de que la mayoría de avances relevantes que han hecho posibles los bienes y servicios que nos proveen un mejor nivel de vida, como humanidad, provienen de avances en la ciencia, que apoyada por la matemática, viabilizada por la tecnología y hecha realidad por la ingeniería, nos acercan importantes descubrimientos y formulaciones a la vida diaria.

Una definición de este término formal es “STEM es la integración intencional de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas y sus prácticas asociadas para crear un ambiente de aprendizaje centrado en el estudiante en el cual los estudiantes investigan y diseñan soluciones a los problemas y construyen explicaciones basadas en evidencia de fenómenos del mundo real con un enfoque en las necesidades sociales, emocionales, físicas y académicas del estudiante a través de contribuciones compartidas de escuelas, familias y socios comunitarios”.

Las frases clave que encontramos en esta definición son “integración intencional”, “centrado en el estudiante”, “soluciones a los problemas”, “basadas en evidencia”, “enfoque en necesidades”, “contribuciones compartidas”. Son varios los requerimientos y con un nivel de exigencia que no hace sencillo un enfoque STEM.

Las habilidades necesarias

La formación de un joven por medio del proceso educativo busca generar y poder contar con una persona productiva por medio de la dotación de conocimiento y el desarrollo de habilidades, definiendo un perfil específico. Para el enfoque STEM hay características que son comunes con la mayoría de aspiraciones educativas.

Habilidades y competencias esperadas en STEM:

  • Habilidades analíticas para investigar un tema, desarrollar un proyecto y su línea de tiempo, y obtener conclusiones de resultados de investigaciones.
  • Habilidades científicas para desglosar un sistema científico complejo en partes más pequeñas, reconocer relaciones de causa y efecto, y sostener opiniones usando hechos.
  • Habilidades matemáticas para realizar cálculos y medidas.
  • Atención al detalle siguiendo direcciones técnicas, registrando datos en forma precisa, concluyendo sintéticamente.
  • Habilidades técnicas, análisis de fallas, reparación y uso de software y equipo moderno.
  • Comunicación y cooperación para escuchar necesidades de clientes o interactuar con socios de proyectos.
  • Trabajo en equipo para completar proyectos exitosamente.
  • Creatividad para resolver problemas y desarrollar nuevas ideas.
  • Liderazgo para dirigir proyectos o apoyar clientes y usuarios.
  • Habilidades organizativas para llevar registro de mucha información diversa.
  • Administración del tiempo para operar eficientemente.

Adicionalmente, son muy importantes las habilidades blandas, que ya hemos tratado en este espacio, definidas en una frase como las cualidades personales, hábitos, actitudes y conductas sociales que hacen a una persona un buen empleado:

  • Comunicación verbal y escrita
  • Liderazgo
  • Organización
  • Curiosidad e imaginación
  • Experiencia tecnológica
  • Trabajo en equipo
  • Administración del tiempo
  • Seguir direcciones
  • Deseo de aprender
  • Solución creativa de problemas

El desafío de nuestro sistema educativo

Si realmente queremos, como país, comprometernos con desarrollar un enfoque STEM en el proceso educativo desde educación básica, media y superior, tendremos que buscar las formas de estimular en los niños y jóvenes, muchachos y muchachas, el gusto y la motivación para comprender los fenómenos naturales, las posibilidades y alcance de la ciencia y la matemática, y la utilidad de la tecnología y la ingeniería.

Para ello, algunos aspectos pedagógicos y didácticos que deberán ser desarrollados por los docentes, directores de centros y formadores de formadores, son:

  • Aprendizaje por problemas y proyectos.
  • Banco de problemas / Árbol de problemas.
  • Fomento de asombro-interrogantes-solución-comunicación.
  • Comprensión de la ruta crítica: Dato-información-conocimiento.
  • Enfoques interdisciplinares y multidisciplinares.
  • Diseño de soluciones a problemas reales fuera del aula.
  • Intervención de tutores profesionales (coaching).

Obviamente, la necesidad de recursos educativos que permitan fomentar el enfoque STEM estará presente, pero lo principal es la comprensión y compromiso con el mismo, por parte de las autoridades educativas, públicas y privadas, de todo nivel. La correlación observada en los países con mejores niveles de vida y productividad, mejores ingresos per cápita y el desarrollo de los componentes de STEM debería ser suficiente argumento.

 

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