¿Cómo se administra la disrupción tecnológica?

Con el desarrollo de las distintas tecnologías que han surgido y evolucionado recientemente, y que poco a poco van haciendo su incursión en las empresas e industrias, actuales y nuevas, la administración de las empresas, por medio de sus juntas directivas y sus gerentes de mayor nivel debe ajustarse y considerar nuevos estilos y formas de dirigir los emprendimientos.

La coexistencia de 4 generaciones de seres humanos en la actualidad (Baby boomers, Generaciones X, Y y Z, para ser breve), algunas de las cuales se encuentran o se hallarán pronto en las posiciones de liderazgo de las empresas, y dado que su visión y comprensión de las tecnologías disruptivas es distinta, hace que la conciliación de objetivos personales y empresariales sea un poco más difícil.

Se vuelve crucial compartir objetivos y planes estratégicos, para que cada uno, desde su experiencia personal, y considerando la visión y el papel de cada empresa y su ruta de crecimiento y desarrollo, puedan incorporar la tecnología de la mejor forma.

Algunas pistas para la administración de la disrupción tecnológica

Como punto de partida, algunas reflexiones sobre cómo se conducen las empresas y organizaciones en la forma clásica, por llamarle de algún modo, y cómo se han destacado frente a la disrupción tecnológica las que actualmente dominan buena parte de su mercado, obviamente con otra mentalidad.

Lineamientos “clásicos”

  • Hacer un producto o entregar un servicio que satisfaga una necesidad en el mercado.
  • Administrar sus operaciones de manera eficiente y mantener los costos bajo control.
  • Crear un camino a largo plazo para sus empleados basado en la confianza y la lealtad.
  • Obtener ganancias y generar valor para los accionistas.
  • Gestionar el riesgo y generar sostenibilidad y crecimiento para las partes interesadas.
  • Hacer lo que la mayoría de los miembros actuales de la junta directiva aprendieron en la escuela de negocios.
  • El modelo actual carece de incentivos para la innovación por el mero valor intrínseco de la innovación.

Nuevos lineamientos

  • Regalar tu producto «gratis».
  • Desarrollar la cultura organizacional de moverse rápido y arruinar cosas (arruinando se aprende).
  • Invertir millones en capital de riesgo sin ganar dinero.
  • Reclamar un valor de millones de dólares por una empresa antes de que sea rentable.
  • No poseer nada de activos (es decir, como Uber, WeWork, Airbnb).
  • Rodear las reglas, regulaciones e impuestos locales para vencer a los competidores tradicionales.
  • Espiar a sus clientes y luego vender sus datos.
  • Vender una oferta pública inicial, convertirse en multimillonario y planear el resto más tarde.
  • ¿Es esto sostenible?
  • Sin esta lógica, ¿tendríamos este nivel y escala de innovación?

En estos nuevos lineamientos hay algunas ideas que, aunque han sido, y son, practicadas por algunas de las empresas más exitosas financieramente a nivel mundial, se acercan peligrosamente a acciones y tácticas no completamente éticas, según los estándares convencionales.

Es importante que las juntas directivas consideren que parte de estas líneas de acción son ejecutadas por algunas empresas con las que compiten. Parte de su papel y deber en los puestos de dirección consiste en saber cómo se mueve el mercado y la economía en la actualidad, para poder administrar la disrupción que la tecnología provoca.

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